Una chica fan del anime muere por una enfermedad y termina reencarnando en su anime favorito Naruto, esta decide corregir los errores.
¿Lo lograra o perderá?
¿Se enamorara en el camino?
Hola pandacornios espero que les guste este capitulo, pronto tendremos más entretenimiento créanme pero la inspiración me dio para esto primero.
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Pov Autora
Al igual que cada año desde que tenía cuatro Miyuki se encontraba en camino a Suna acompañada de sus padres, esta vez el regalo para Gaara era más grande y pesado aunque insistia en cargarlo sola.
Pronto llegaron a la aldea por lo que caminaron el tan conocido camino hacia la posada, una vez que dejaron sus cosas Miyuki salió prácticamente corriendo hacia el parque donde se reunía con Gaara.
Dicho niño ya se encontraba esperándola en una esquina del parque con las manos detrás de la espalda, le había costado encontrar un regalo que lo convenciera para Miyuki pero estaba seguro de que le gustaría.
Miyuki: Gaara *Lo saluda con la mano mientras corre hacia él* Te extrañe mucho
Gaara: Yo también Miyuki *Le extiende el regalo* Ten es para ti por tu cumpleaños
Regalo de Miyuki (Ignoren el vaso)
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Miyuki: Es muy bonita *La toma con cuidado* Combina con mis ojos
Gaara: Por eso la elegí, me gusta el color de tus ojos y en Suna no he visto a alguien con ese color son muy bonitos
Miyuki: Gracias *Le da un beso en la mejilla* Yo tampoco he visto a nadie con tu color de ojos nunca, son verdes y azules a la vez
Básicamente haci estaban Gaara y Miyuki
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Ambos niños fueron donde Kyo e Inoue quienes habían visto el intercambio con una sonrisa para entregarsela para que la cuidaran, luego de eso Miyuki tomó la mano de Gaara jalandolo para ir a jugar.
Jugaron tranquilamente durante un rato hasta que Miyuki sintió una mirada, volteo y vio a Temari, Kankuro y un niño que no reconoció observandolos desde otra área del parque más alejada.
Nuevamente los ignoro y siguió jugando con Gaara, ambos se contaban cosas que les habían pasado que no estaban en sus cartas más Miyuki que Gaara pues este se negaba a entristecer a su amiga por las tonterías de su padre.
