Ch.4

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Al día siguiente, Issei se levantó con un humor excepcional, desayuno con lo poco que tenia en casa, agarro la mochila y camino hacia la escuela.

Al llegar, vio como la gente hablaba animadamente entre ellas y caminaba a sus aulas, al doblar la esquina del pasillo que daba hacia su clase, vio como una de las amigas de Rias, caminaba hacia su dirección.

-Buenos días Himejima-sempai ¿Qué la trae por estos pasillos?

-Buenos días a ti también Ise-kun, Sona me pidió esta mañana que supervisara estos pasillos, resulta que ayer se pelearon y Soma no tolera ese tipo de comportamientos bajo su mandato.

-Entiendo ¿De eso es lo que quería hablar con Gremory-sempai ayer?

Issei al darse cuenta que había preguntado de más, se inclinó hacia adelante mientras su cara se ponía roja por la vergüenza.

-Lo lamento, no debí preguntar eso, no es de mi importancia

Akeno, rio al ver la cara avergonzada de Issei y sonrió.

-No te preocupes Ise-kun, no preguntaste nada malo y no, lo de ayer es algo un poco más personal.

El chico aun avergonzado se rasco la nuca mientras asentía con la cabeza cuando de golpe sintió una vibración en su viejo móvil, saco el dispositivo electrónico y se olvidó de que tenía a la vicepresidenta del club de ocultismo al ver quien le enviaba el mensaje donde una inevitable sonrisa apareció por su rostro.

Akeno, curiosa por la reacción del chico se inclinó un poco hacia delante disimuladamente para ver quien le había hablado, al ver el nombre del remitente, una sonrisa diabólica apareció en su cara mientras ponía cara picara.

-Con que te hablas con Rias eh

Issei, al ver la cara de Akeno y su sonrisa, no pudo evitar que su cara se pusiera roja por segunda vez en el día mientras movía las manos delante de el de forma exagerada.

-No es lo que piensas Himejima-sempai, solo le envié un mensaje ayer por la noche agradeciéndole por las clases

-¿Cómo conseguirse su número? Porque solamente lo tenemos yo, Sona y los miembros del club.

-Ella me lo dio cuando estuvo a punto de irse.

Akeno se sorprendió de que Rias le hubiera dado su número de teléfono, pero lo disimulo para que el castaño no lo notase y asintió con la cabeza-

-Veo, pues siéntete afortunado, no le da su número a cualquiera.

Antes de que Issei pudiese contestar, la campana donde marcaba el inicio del día, sonó con fuerza haciendo que retumbase por las paredes de la academia Kuoh.

-Bueno Ise-kun, ha sido un placer hablar contigo, espero que podamos hablar mas a menudo.

-El placer ha sido mío Himeima-sempai.

Issei se inclinó en modo de despedida mientras Akeno sonreía y empezaba a caminar a su propia clase cuando se paró de golpe mientras se giraba y miraba de nuevo al castaño.

-Puedes llamarme Akeno, los amigos de Rias son mis amigos, además me caíste bien.

Issei sonrió en modo de agradecimiento, se despidió con la mano y entro en su aula.

Akeno, al llegar a su clase, visualizo a cierta pelirroja que miraba a través de la ventana y procedió a sentarse a su lado.

-Con que andas enviándote mensajes con un chico castaño de segundo eh

Rias, al principio se sobresaltó un poco ya que al estar sumergida en sus pensamientos no se dio cuenta de la llegada de su mejor amiga y luego, al procesar lo que esta había dicho, se sonrojo leve mientras jugaba con su móvil.

Rojo CarmesiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora