Una Vida Entre 4.

2.

Al abrirse apareció un muchacho alto, más alto que ella, con cabellos lacios en la cara, con una camisa negra de cuadros abierta del primer botón, y pantalones de mezclilla.

-hola, busco a Gabi- dijo toda confundida.

-¿quién lo busca?- dijo con voz de interés, mientras se recargaba con el antebrazo en el marco de la puerta, todo esto mientras la escaneaba de arriba a abajo

-Alex- dijo sintiéndose amenazada por su mirada.

-ahh- dijo el aun interesado- ¿así que me buscas a mí?

-¿eres tú?- dijo toda espantada-*en que me metí*- pensó.

-sí, y ¿Qué trae tal hermosura a mi casa?-dijo con voz sensual.

-*chasqueo sus dedos en su cara*, ¿sabes quién soy o estas embobado?-dijo Alex.

-eres Alex...- hizo una pausa- a la mierda!!!- dijo entrando en razón.

-¿pero no eras hombre?- dijo Gabi

-¿y tú no una mujer?- dijo Alex

-yo soy hombre y mi pequeño amigo te lo puede comprobar- dijo Gabi con un pequeño guiño.

-concéntrate, dime que no es una casa de puros hombres- dijo Alex.

-sip, los tres -dijo- *ya la cage*- pensó.

-¿quieres pasar?- dijo extendiendo el brazo hacia dentro de la casa dejándola pasar.

-gracias- dijo con incomodidad.

Al entrar se dio cuenta que era amplia la casa todo ordenado, lo primero que vio al entrar era la cocina, le impresiono que no haya trastos sucios, todo estaba en su lugar, al voltear a la izquierda encontró el comedor que era una barra enfrente de la cocina, siguió viendo en esa dirección y vio la sala con un sofá enorme, en frente de este una mesa bajita con un tazón de palomitas, había un televisor enorme, se percató que había alguien en la sala. Al parecer estaba jugando y traía cascos, se veía concentrado.

-Lucy saluda!- dijo gritándole.

-ahh!?- dijo confundido- ¿es tu noche?

Nota: noche es una clave entres los tres que significa que te acostaras con ella toda la noche, pero para no ofender dicen tu noche, ya que suena romántico y entienden tu noche tu luna y tus estrellas.

-no idiota! Es Alex- dijo Gabi.

-¿quien?!-dijo gritando, sin apartar la vista del televisor.

-ahora si te cargo la chingada- dijo abalanzándose con intención de pelear- ¿qué te dije de bajarle el volumen a tus audífonos?- dijo mientras le quitaba los audífonos a puñetazos.

-hola...- dijo una voz tímida detrás de ella-¿eres la noche de él?- dijo mientras apuntaba a Gabi en medio de su pelea.

-no... y no sé qué es tu noche- dijo aún más con fundida ya que se lo habían dicho dos veces.

-¿serias mi noche?- dijo tímido y sonrojado.

-creo que te confundes, creo que soy la nueva integrante de esta casa, soy Alex por cierto- dijo amable ya que vio que la trato muy tímido y tierno.

-entonces vete a la mierda- dijo mientras se dirigía al refrigerador a sacar una cerveza.

-¿...?- ahora se sentía más confundida.

Decidió sentarse en la barra de la cocina para pensar en lo que pasaba; horas después dos se sentaron enfrente de ella para platicar.

-entonces ¿tú eres Alex?- dijo Lucy.

-sí, ¿tú te llamas Lucy o porque te dicen así?- dijo

-me llamo Lucyel- dijo- pero la mayoría me llaman Lucy-

-y tu, si te dicen Gabi entonces es ¿Gabriel?- dijo Alex.

-sí, y el que te mando a la mierda se llama Mariel- dijo.

-y ¿por qué cuando me vio se hizo el tímido?-dijo Alex.

-por qué le gustaste, a él le funciona hacerse el tímido, pero en realidad tiene personalidad fuerte- dijo Lucy.

-vete a la mierda!- se escuchó del otro lado de la sala.

Alex presto mucha atención lo que estaba pasando y vio que Lucyel era un muchacho de cabellos chinos largod, amarrado en una coleta, rapado de la parte de abajo, tenía buen cuerpo junto con el de Gabriel, se voltio para ver a Mariel; él tenía algo peculiar también era lacio pero sin rapado de ningún lado, largo de la nuca pero se hacía un poco más corto serca de las orejas, también tenía musculo como los otros dos sentados detrás de ella, pero él era más alto, aproximadamente media 1,90, Gabriel 1,82 y Lucyel 1,86; Alex tenía solo 1.60 de altura.

-¿Que me vez verga?- dijo Mariel.

Esta se voltio y volvió a ver a los otros dos mirándola con deseo, ya que llevaba un escote pronunciado y unos shorts muy cortos.

-Gabriel, ¿me puedes mostrar mi aviación o decirme dónde está?-dijo Alex.

-si hermosa, está en el pasillo alado de la sala, las puertas son blancas una tiene un cartel, la de enfrente es la tuya- dijo mientras miraba solo su cuello y su escote.

-gracias- dijo Alex.

Esta se levantó y jalo sus maletas hacia su habitación, en eso se hizo un silencio incómodo y acelero el paso, al llegar abrió la puerta metió todo y la cerró; todavía sosteniendo la manilla de la puesta y recargada su frente, sintió una presencia detrás de ella, se giró y estaba Mariel acorralándola contra la puerta.