𝚆𝚒𝚗𝚝𝚎𝚛 𝙱𝚎𝚊𝚛 ♡︎ 𝙺𝚘𝚘𝚔𝚖𝚒𝚗 || 𝙵𝚒𝚗𝚊𝚕𝚒𝚣𝚊𝚍𝚊

007

Otros siete años se habían pasado, maltido era el tiempo de irse tan rápido como el viento en una fuerte tormenta.

Hoy era de esos días en los que Jimin estaba sentado frente a su venta mientras veía las gotas de agua impactar contra el suelo formado pequeños charcos en el amplio jardín trasero que deba su ventanal, hoy era su cumpleaños número veinticuatro y Jungkook estaba en uno de sus viajes de negocios así que probablemente solo la pasaría en su habitación y en el mejor de los casos la señora Jeon vendría a verle.

Despegando su vista de la venta dirigió su vista a sus brazos los cuales tenían una intravenosas de suero, si ahora cargaba esas cosas pegadas a sus venas una buena parte del tiempo y ni hablar de su tratamiento para el asma, un inalador era especial para cada doce hora y el otro apenas usado cuando sintiera su pecho cansado.

Junto a ese inalador de cada doce horas el cual tenía que usar de por vida venían algunos problemas cardíacos creados por el mismo tratamiento así que debía tomas pastillas las cual él consideraba las más lindas; estás erán para su corazón desenfrenado, eran rosadas y en forma de corazones ademas un tanto dulces aunque no muy ricas del todo.

Suspiro triste preguntándose si Jiwon vendría hoy a felicitarle.

Si, habían vuelto hablar luego de un año y algunos meses pero cabe recalcar que nada volvió a ser igual que antes, esta vez el castaño era más alejado y podia notar algunas miradas de desagrado de su parte.
Entre todo eso era que por lo general solo iba a verle cuando Jungkook estaba en casa muy pocas veces venía por su propia cuenta y cuando venía era extraño pues apenas se limitaba a dar cortas palabras mientras le veía en silencio a lo que Jimin respondía con sonrisas tímidas e incómodas en algunos casos.

Suspirando de forma pesada se levantó del banco para dirigirse a un lado de la cama junto con lo que él llamaba "el tuvo con ruedas malvado que sostiene el suero maldito" nombre largo pero en su cabeza era gracioso, camino hasta posicionarlo a un lado de su cama, en esta de sentó en la espera de que ese estúpido tratamiento terminará para quitarse las intravenosas con sumo cuidado.

Ya fuera de su organismos se volvió a levantar de la cama para buscar un pijama el cual consistía en una camisa blanca de mangas largas y un pantalon largo holgado del mismo color, realmente parecía la ropa de un paciente enfermo pero amaba usar ese pijama en su cumpleaños.

Al abrir su armario para buscar lo mencionado pudo observas a su gata acostada sobre una de sus prendas de ropa y si, la señora Jeon le había regalado una gata calico para que esta le acompañara durante su tiempo solo.

Era una lastima que esa bolita de pelos parecía absorber todas la tristeza de la habitación dándole un aspecto cansado y desanimado a la gata que por lo general se mantenía durmiendo entre su ropa o su cama.

Con cuidado de no despertar a la felina se decidió a buscar su pijama cosa que termino por hacer con éxito, ya con la ropa en manos se dirigió al baño donde se despojó de toda su ropa para entra a la tina con agua en una temperatura de -5° cosa que él consideraba una agua relativamente tibia y refrescante.

Jadeo satisfecho una vez su cuerpo estuvo totalmente sumergido en el agua, sintiéndose en paz se permitió disfrutar de su baño restregando la esponja en su delicada piel mientras en la tina habían mucha espumas gracias al jabón líquido que le recetó su doctor y dermatólogo.

Al cabo de unos minutos termino con su baño saliendo para vertir aquella crema que él consideraba mágica por toda la piel de su cuerpo desde la punta de los dedos de sus piel hasta su rostro.N

Una vez con su cuerpo lleno de crema espero a que esta se secara para luego vestirse con aquel pijama blanco, agradecía haber nacido en invierno pues tenía la ventaja de poder salir de su habitación con la condición de cuidar su piel con aquella crema "mágica" que tenía un poco de brillitos gracias a su doctor que fue amable en echar un poco de brillitos rosas y azules en la crema.

Bueno, para Jimin fue amable, para el doctor realmente fue una cura pues sabía la obsesión de auto lastimarse del híbrido con la intensión de que su piel tomara otros tonos que no fueran blancos así que vio en la escarcha una pequeña esperanza la cual había funcionado los últimos años.

Sonriente y decidió a salir de su habitación abrió nuevamente su clóset para buscar una boina de ajedrez color marron que le había regalado un chico llamado Taehyung quien había venido a visitarlo algunas veces, este era un híbrido de tigre hijo de su psicólogo.

Una vez con la boina puesta busco a su gata quien tenía un pequeño abrigo tejido puesto por las bajas temperaturas que habían en su habitación y le puso un gorrito para seguido tomarla en brazos.

La felina se acurrucó contra su pecho gustosa, prueba de eso su suave ronroneo que hizo sonreír a Jimin.

Frente a le puerta suspiro, no tendía a salir si no estaba Jungkook pero en la tina lo pensó y no quería quedarse encerrado en su habitación. No el día de su cumpleaños número veinticuatro, un número que nunca espero alcanzar.

Decidido poso su dedo en aquel pequeño escáner con la esperanza de que Jungkook no allá bloqueado su huella con su ida como la había echo algunas veces que no quería que saliera de la habitación por castigos o simplemente por no querer dejarlo salir.

Una vez la puerta se abrió agradeció a todos sus adentro y salió sintiendo la mansión un poco caliente con 5°, relativamente estaba fresco y no tan frío como su habitación pero le servía esa temperatura pues la regla de la "crema mágica" era que solo funcionaba estando a una temperatura ideal bajo los 10° grados.

Sonriente se dispuso a caminar por la mansión con su gatita en brazos dejando leves caricias en sus orejas; al finalmente llegar al jadir se sentó en una de las bancas cerca de un lago el cual tenía pequeños fragmentos de hielo por todas partes.

Disfrutando de ese magnífico momento fuera de su habitación con su querida felina en el regazo observando aquello que para el era un paisaje hermoso se dispuso a tararear una de las canciones que había escrito durante sus días en la fría habitación.

La canción se titulaba por "Lie" y amaba esa canción, realmente aveces sentía que su vida era una mentira entre tantos caminos y vueltas en el laberinto de su propia habitación sin pared o muro alguno que le impidiera ver, sin embargo su mente creaba un juego en su subconsciente en la espera de alguien mientras seguida caminando por esas paredes inexistente.

Terminando de cantar miro a su gata quien también le miró atenta.

- Quien me lo quito? A quien estoy esperando?

La gata soltó un maullido a lo que Jimin entendió un " Tu patito?" Y si, el era un híbrido y no se le era tan complicado entender a otros animales.

- No.. el patito es pasado.

La gata volvió a maullar intentando que le diera mimos en la cabeza.

- Tampoco es Jungkook.

- Yo no soy que? - escuchó una voz muy conocida a sus espaldas, el dueño de esta voz posó su mano sobre su hombro haciendo un escalofrío recorrer su blanca piel, enseguida sintiéndose nervioso.