»Los secretos son como las mentiras, tarde o temprano se saben, por qué cuando guardamos un secreto mentimos para que este se mantenga sellado y en el momento en que mentimos es cuando protegemos algo ...como un secreto.
-Los personajes de Shingeki...
—Hasta cuándo voy a seguir que? — pregunté deteniendo lo que estaba haciendo sabiendo muy bien a que se refería el.
—Hasta cuando vas a seguir entrenando? Tenea — dijo este juzgando por su tono de voz un tanto enojado.
— Hasta que mi cuerpo y mi mente dejen de funcionar Reiner — di la vuelta encarándolo y es que odiaba eso de él , odiaba que él me sobre protegiera como si y fuera una niña pequeña.
—Déjame encargarme de eso entonces.
Un golpe en seco fue lo único que sentí para derrumbarme completamente en el suelo, dejándome caer a los brazos de Morfeo o en los brazos de los recuerdos.
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»Dicen “que nunca sabemos lo que tenemos hasta que lo perdemos” cosa que es cierto siempre estuve cerca de mis seres queridos e nunca les dije cuanto los amaba, cuanto los quería de verdad y ahora, ahora no sé si están vivos o muertos. Lo único que se es que me arrepiento de ser tan reservada con ellos aún teniendo mis razones, me arrepiento de ser como soy por qué sé que si pudiera volver el tiempo atrás o volver a encontrarme con ellos seguiría siendo como soy, por qué por más que lo intente no puedo cambiar mi personalidad, ni como soy.
Estaba viva, lo sabía, me encontraba en un refugio en el Muro Rose ¿cómo llegué?, no lo sé, ¿por cuántos días sobreviviré? Tampoco lo sé, solo espero que se ha pronto.
—Hola —una sombra se posó frente a mí, alcé la mirada encontrándome con un chico a simple vista mayor que yo peli rubio —A caso no hablas? —espeto este después de unos minutos en silencio .
—Claro que hablo, solo que no quiero hablar contigo.
—Pues ya estás hablando —sonrío este de oreja a oreja —Soy Reiner
