Everything can happen

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Mi mamá me enseñó a ser puntual desde pequeña, para levantarme nunca había necesitado una alarma, ya tenía una rutina hecha. Pero desde que conocí a Danielle he llegado tarde a el 90% de mis clases.
Este año compartía habitación con Dani, el año pasado compartí con Eleanor y con Barbara, cabe resaltar que con ellas nunca llegaba tarde. Pero aun así, Danielle era una de mis mejores amigas.
Ya que no necesitaba una alarma para despertarme me levanté 6:35 am sin importar que fuera fin de semana. Observé todo el cuarto: Danielle, echada boca abajo y el cuarto desordenado. Habría limpiado el cuarto ayer pero estaba muy cansada.
Fui al piso de la lavandería y planché la ropa que usaría hoy. Luego saqué una toalla limpia de mi maleta y fui al baño a ducharme.
Abrí la puerta del baño, me sobé los ojos y prendí la luz.

-¡MIRANDA! ¿Qué te ocurre? ¿Qué no sabes tocar?-. Harry estaba frente a mi, sin polo y sin pantalón. Ok.

-Discúlpame, creí que te habías ido, son las... ¿podrías ponerte el pantalón por favor?- soltó una pequeña risa y se lo puso-. Como decía, son las seis y media de la mañana se supone que a esta hora todos deberían estar durmiendo, un fin de semana.

-Bueno pero yo no, tengo que llegar a mi casa temprano.

-Pero...- no sabía como contraatacar-. Está bien, báñate rápido. Esperaré en la sala.

-No, báñate tu primero.

-Si intentas verme desnuda no lo lograrás...

-Ok, me bañaré yo primero.

Harry se demoraba más que Danielle, tuve tiempo para desayunar, lavarme los dientes y revisar los mensajes que me habían dejado.
Cuando por fin se dignó a salir del baño traté de no mirarlo y entré.
Al salir me cambié y fui a despertar a Danielle. Como soy buena amiga le preparé el desayuno. Saqué una agenda de mi cartera y vi que cosas tenía planificadas. Nada.

-¿Que haremos hoy?-. Pregunté.

-Mmm... podríamos ir al centro comercial a almorzar.-

-Y luego al cine, ¿te parece?- apunté la idea de Dani en mi agenda.

-Avísales a Ellie y a Barbara.

Las llamé y estuvieron en casa de Dani en menos de 20 minutos. Nos quedamos jugando juegos de mesa durante un par de horas, me cambié de ropa porque estaba prácticamente en pijamas y fuimos a almorzar.
Todas pedimos hamburguesas con extra queso. Teníamos demasiada hambre.
Para bajar un poco la comida, fuimos a caminar durante un largo rato. Elearon llamó a Louis, Barbara a Niall y Dani a Liam.
Danielle vivía con mi hermano desde el año pasado, era la única del grupo de mis amigas que no tenía un novio. Por suerte ellos se fueron rápido, siempre que sus novios estaban presentes era yo la que sobraba.
Dieron las seis de la tarde y aún no sabíamos que película íbamos a ver.

-Hay que ver la de Bob Esponja- sugirió Barbara.

-No, yo creo que deberíamos ver 50 sombras- dijo Danielle.

-Mejor veamos una comedia- dijo Eleanor.

Terminamos viendo una película francesa que no tenía subtítulos y trataba sobre el llanto de las personas.
Cuando acabó la película decidimos ir a una discoteca para relajarnos del estrés de la universidad.
Todas fuimos en el convertible de Dani y nos dirigimos a "Centro de Baile de Londres". En el camino fuimos escuchando música a todo volúmen.
Esperamos a Louis y a Niall en la esquina. Por suerte no sería la única sola, Liam no podría venir.
Fuimos a la fila para entrar, el guardia de seguridad no dejó entrar al chico que estaba delante mio.

-Son las reglas, menores de edad no entran aquí- se cruzó de brazos.

-Pero cumplo 18 en un par de meses- ¡Era Harry!

-Disculpe, el viene con nosotros- dije.

-Oh, entonces puede pasar- nos abrió la puerta y la música retumbaba en el piso.

-¡Gracias por la ayuda!- gritó Harry sobre la música- ¿Quieres algo para tomar?

-De que quiero, quiero. Pero a ti no te dejarán comprar las bebidas, yo las compro ¿qué quieres?-

-Una lata de cerveza.

Fui donde el barman y le pedí dos latas.
Después de tomármelas con Harry, perdí de vista a mis amigas. Bailamos durante horas y también hablamos.
A eso de las 4:00 am pedimos un taxi para que me dejara en mi casa, y luego a Harry.
No era de tomar mucho alcohol y es por eso que no pude mantenerme en pie con la lata de cerveza. Fui tanteando hasta mi cuarto, me puse la ropa para dormir y me metí en la cama.
Esa noche soñé con Harry.
Soñé que íbamos caminando por un bosque y que todo era perfecto, que al atardecer me debaja en mi casa y me ponía a pensar: "Soy tres años mayor que él."
Un montón de pensamientos llegaron a mi mente, pero eso no impidió que siguiera soñando con Harry.