Stand by me

-3-

When the night has come
And the land is dark
And the moon is the only light we'll see
No, I won't be afraid
Oh, I won't be afraid
Just as long as you stand, stand by me...
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Ya había pasado al menos dos minutos desde que la camioneta blanca de Cal Jacobs había desaparecido de la vista de todos, sin embargo, Fez aún estaba parado bajo la fría noche, siendo alumbrado por la luz que provenía de la tienda a sus espaldas. Ashtray salió de su escondite mirando de arriba a abajo a la inusual castaña que seguía en el mismo lugar observándolo, después miró a Faye que estaba igual de confundida que los demás.

—¿Quien mierdas era ese? —preguntó cuando estuvo a lado de Fez quien por fin se movió para mirar a su hermano menor.

—No tengo idea. Pero será mejor que cerremos temprano hoy, no sabemos sí vendrá más tarde con compañía. Faye —llamó a la rubia de prominentes labios —ayuda a Ash a cerrar.

Rodando los ojos, esta asintió pasando a un lado de Lexi que aún persistía ahí, sin moverse, sin decir nada.

—¿Estas bien?

Su cuerpo saltó al escucharlo frente a ella, no se había dado cuenta cuando se había acercado. No le importaba en absoluto.

—Si, claro —balbuceó tratando de sonreír.

Se sentía tan vulnerable frente a él, aunque solo estuviera ahí, tan tranquilo, sin parecer una amenaza. No para ella.

—¿Vienes con alguien?

—Uh... si- bueno- no, no realmente, solo quise salir a pasear un rato en mi bicicleta.

En serio estaba intentando articular correctamente sus palabras, pero su mirada tan profunda y relajada la estaba haciendo sentir tan extraña.

—Bueno... ya me voy —señaló hacia su bicicleta que estaba apoyada sobre una pared detrás de ella.

Iba a dejar que ella se fuera, pero la hora ni el vecindario eran seguros, mucho menos después de la clase de amenaza de ese hombre.

—Espera —dijo antes que subiera a su bicicleta. —Te llevaré a tu casa —no sonó como una pregunta.

La adolescente se quedó congelada sin saber que decir, ¿está era la parte donde debía rechazarlo o aceptar? Pero en seguida se dió cuenta que no le había dado dichas opciones para elegir.

—Si... claro —murmuró soltando las manillas.

Ambos volvieron a entrar a la tienda para entre todos cerrar las cortinas de metal y poner cada candado y llave que hiciera falta. Al estar todos afuera, Fez subió la bicicleta de la castaña a la cajuela para entrar al auto. Ash estaba en el asiento de copiloto, mientras Faye y Lexi estaban atrás apoyadas en la ventana a su lado, separadas lo más que les fuera posible.

Cuando el auto arrancó e iniciaron la ruta, Fez miró repetidamente al retrovisor observándola, ella miraba fuera de la ventana mientras sus manos estaban entre sus muslos, como sí quisiera hacerse bolita.

—Ese tipo estaba demente —soltó Faye de repente rompiendo el silencio.

Todos se miraron entre sí, hasta Ash llegó a cruzar mirada fijamente con Lexi haciendo fruncir sus cejas.

—Si, y por cierto ¿Por qué mierdas dijo que ella no nos dijo quién era? — señaló a Lexi que estaba detrás de el. —Tal vez fue su culpa que viniera.

—Ash... —advirtió el mayor mirando la carretera.

El adolescente se tragó sus palabras y todo volvió a estar en silencio.