Contra ti...

5. Esa chica

Olaaaa, buenas noches estrellitas, está es nueva actualización AAAAAAA; les quería decir una cosa muy importante, este capítulo narra un recuerdo de Deys, si no les gusta no lo juzguen por favor, dejen volar su imaginación, desde un principio yo avisé mi historia tiene de todo un poco no quiero después quejas de lo que escribo,eso es todo los quiero mucho AAAAA<33

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Esa chica…

{Deys}

Me quedé dormida dure alrededor de unas horas, me despierto reviso el celular eran las 2 de la mañana, intento quedarme dormida, pero nada el recuerdo de una noche llega…

“… Entramos a la casa, nos sentamos en el sofá de cuero negro y comenzamos a hablar de cualquier cosa, ella es especialmente buena para escuchar todas las estupideces que salen de mi cabeza.

– ¿Por qué crees que nos sucede esto? – pregunta la castaña acostada en el sofá, usando mis piernas como almohada.

–¿De que hablas?

– Somos mujeres Deys, no es normal que me parezcas tan insanamente hermosa – lleve una de sus manos a mi mejilla – Debería tenerte envidia nada más.

– Sabes que hay una palabra para eso ¿Cierto? Quiero decir una palabra para lo que estamos haciendo – hablo nerviosa.

Ella parece entristecer un poco.

– Mis padres odian esa palabra

–No casi todos los odian, estoy segura–me inclino para darle un beso rápido, de esos que hacen un ruido pegajoso.

– No tenemos que decirle a nadie Mackenzie–  suspiro cerca de su rostro

–Dios Deys yo tengo novio–eso era lo de menos para mí, la quería era a ella.

–Entonces será nuestro secreto– me acerco a su oreja, jamás aunque creo tener imaginación me hubiese creído este lado sensual y deseoso de Mackenzie me pone demasiado

– Yo nunca he roto las reglas Lonkuss… –ella susurre en mi oreja, yo la agarro del cuello, le doy un suave beso, paso mi boca por su cuello, subo mis beso y le voy mordiendo el lóbulo de su oreja, nuestros latidos eran rápidos más veces por segundo
 
– No las rompas… Tu sólo finges que no me conoces, complace a todos y omite cosas como esta…– me lance sobre ella, en un movimiento la coloco sobre mis piernas, comienzo a darle un apasionado beso. Con muchas ganas muevo mis labios sobre los suyos, siempre he sido muy fan del ruido que hacen los besos y puedo decir los labios de esta chica hacen un sonido especialmente sexy y atrayente, como un droga.

Intento abrir su camisa de estilo retro, nos reímos en medio del beso porque los malditos botones son muy difíciles, ella me ayuda, miro hacia abajo cuando termina y abro su camisa como si fuera un regalo, la vista es un maldito tesoro, su abdomen esta tierno esa palabra le queda y tienen un montón de pecados repartidas uniformemente me parece tan increíble tener a lo disposición el cuerpo de alguien tan perfecta como Mackenzie que me pongo nerviosa  la abrazo dentro de la camisa, luego vuelvo a buscar sus labios para encontrar valentía.

La agarro de la cintura, alzándola y llevándola a mi habitación, cuando llegamos ella mete sus dedos en el cabello atrás de mi nuca para profundizar el beso, lo hace, cada vez va más rápido, da un gemido que me enciende totalmente, intento meter mi lengua que solo termina rozando sus labios por la intensidad del acto, me da una mordida muy fuerte en el labio inferior, ahora soy yo la que gime.