¿Novios?

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❥ pronombre : elle, -e
❥ aviso : la habitacion de bruno es distinta.

Odiabas ir al mercado. Mucha gente se cruzaba en tu camino, niños correteaban por todos lados sin supervisión, los pisos eran desnivelados y llenos de tierra, y habían gritos proviniendo de todas direcciones.

Pero debías hacer las compras cada domingo a las cuatro y media de la tarde sin falta.

Así que ahí estabas, alzando la voz para que el vendedor te diera la cantidad de tomates que necesitabas.

Era una pesadilla.

El vendedor te dio una bolsa con tus cosas, y pagaste. Revisaste tu reloj de muñeca por enésima vez. Faltaban un par de minutos para las cinco.

Era hora.

Te dirigiste hacia la vitrina de una virgen María en medio del mercado, y sonreíste ampliamente al ver ahí, recargado contra la pared al lado, a Bruno Madrigal con una bolsa en manos y jugando con los bordes de su ruana.

—¡Bruno!— llamaste su atención.

Él de inmediato se incorporó, una sonrisa tímida en sus labios.

—¡T/n!

Tus mejillas se calentaron. Amabas cuando decía tu nombre.

Extendiste tu mano, y él la agitó. Te recargaste a su lado, escondiendo tus manos tras tu espalda.

—Que casualidad encontrarte aquí de nuevo— dijiste con cierta burla. Él rió. Esta rutina ya les era costumbre. —¿Estás haciendo las compras para tu hermana?

—Ah, sí. Julieta necesitaba algunas especias, así que me ofrecí a comprarlas. Además, yo necesitaba más materiales para los escenarios de mi telenovela, así que...

Jadeaste de emoción, y tomaste su brazo sin pensar.

—¿Ya terminaste de escribir tu siguiente capítulo?

Pronto, Bruno hablaba sobre su nueva idea para una telenovela, gesticulando exageradamente los diálogos, hasta actuando las escenas que recordaba. Todo entre risas y aplausos tuyos, que parecían alimentar su confianza y emoción.

Calmando tu risa, te detuviste a admirar al hombre frente a ti que le hablaba en una voz gruesa a la rata que trajo consigo, y fuiste incapaz de apartar la mirada de esos grandes ojos verdes. Probablemente eran los ojos más bonitos que habías visto en tu vida, y no entendías cómo es que ese hombre era tan perfecto.

—¡Tío!— Una voz masculina gritó a lo lejos —¿Desde cuándo aquí tienes pareja?

De inmediato, Bruno se desesperó, dio vueltas intentando esconder a su rata en algún lugar de su ruana y se detuvo buscando con la mirada a quien lo llamaba. Hiciste lo mismo, hallando a la distancia a un adolescente de rulos con ruana, quien estaba al lado de otra adolescente de cabello corto y lentes. Te parecían conocidos, y seguramente era así, pues si el niño llamó "tío" a Bruno, entonces debían ser de los Madrigal.

Sentiste tu rostro arder y sin pensarlo diste un paso atrás, distanciandote de Bruno. Bruno por su parte, completamente enrojecido, te vio de reojo antes de volver su mirada al par que se aproximaba.

—Yo no... Elle no es... Um...— Bruno intentó hallar palabras.

Reiste de los nervios, pero te arrepentirte de inmediato al ver que eso causó que Bruno se encogiera en sí mismo.

—¡Ya era hora!— se burló el niño.

—¡Sí! ¡Estoy feliz por ti, tío Bruno!— dijo la niña.

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⏰ Última actualización: Mar 09, 2022 ⏰

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I just wanna kiss you ;; Bruno x tú One ShotsDonde viven las historias. Descúbrelo ahora