Baby Seok 🐿SOPE 🐱

🐿12

nervioso, así se encontraba Hoseok que no dejaba de dar vueltas en la cama de Yoongi quien nuevamente había salido temprano, la ardillita tenía un presentimiento que conocía bien, suspiro una vez dejo de dar vueltas, jisoo lo miró desde el marco de la puerta, dió un pequeño toque sobresaltado al más pequeño.

–noona.

–hola Seokie, ¿cómo amaneciste? –preguntó en una gran sonrisa.

–bien noona, aunque, estoy nervioso, ¡no dejo de sentir mariposas!

la mayor soltó una sonrisa que hizo al mejor agitar su cola curioso y ladear su cabeza, pese a saber, aún no era conciente del fuerte lazo que tenía con Yoon en ese punto. y Jisoo sabía el por qué, pues Yoongi finalmente se le iba a declarar, sería un día especial en unas cuantas horas.

–es normal pequeño, ahora baja a desayunar que tus hermanitos preguntan por ti –depositó un beso en los cabellos castaños de Hoseok quien río ante el tacto, después su noona abandono la habitación.

se levantó, cambio sus ropas a unas ligeras pues en las mañanas no hacía tanto frío, fue a la cocina siendo recibido -como todas las mañanas- por unos pequeños bebés y niños híbridos para preguntar por él, ya era una rutina que amaba.

ayudo a la pelinegra a lavar los que ocuparon en el desayuno, al terminar la mayor tuvo que salir para realizar pequeñas compras, aunque, esto no sería tanto así. al salir se dirigió a la cafetería favorita de Yoongi quien se encontraba sentado en la ventana quién al verla alzó sus orejas mientras sonreía.

–¿tienes todo listo?

–sí, bueno –movió su cola a los lados mientras sus pómulos se teñían de un bonito color carmesí– no sé, tal vez yo no sea su indicado, e-es muy joven.

la mayor se levantó de su lugar, tomo a Yoongi de la mano sacando de la cafetería, al más pequeño quien aún seguía sonrojado, una vez a fuera la pelinegra sostuvo al más grande por sus hombros obligándolo a que se mirarán.

–Min Yoongi, eres el híbrido más lindo y hermoso de este mundo, y Hoseok encontró en ti lo que buscaba, un alma gemela que lo cuidara, tú también lo que jamás imaginaste en alguien lo tuvo él.

dicho esto, la mayor llevo a Yoongi a los departamentos donde le declararía su amor al castañito, tenían que arreglar ese lugar para su momento, jisoo barría mientras que Yoongi instalaba pequeños focos que adoraban una cama que el mayor había comprado al igual que una cocina, un pequeño sillón color pastel, muchas plantas y flores, además de tenues cortinas blancas. todo se veía realmente hermoso.

dejo sobre la cama ya tendida, unos peluches de un gato y ardilla, al verlos sonrió en grande imaginándose junto a su ardillita cada mañana, despertando al lado del ser más maravilloso de este mundo, su adorable Hoseok.

jisoo se posicionó a su lado mirando lo bonito que se veía aquella cama, Yoongi la miró aún sonrojado pero con más calma, no sabía que sería de él sin su adorada noona, tomo las manos de esta mientras las llevaba a sus labios, depositando un pequeño beso enterneciendo a la mayor.

–g-gracias jisoo noona, por estar siempre, por apoyarme pero, sobre todo –a este punto el avellana ya tenía lágrimas cayendo por sus pómulos, asustando un poco a la pelinegra– tengo miedo, pero, sé que este nuevo comienzo estarás en mi corazón.

la mayor también sostuvo las manos del minino quien tenía las orejas caídas y el movimiento de su cola era muy lento, también sentía ganas de llorar, sin embargo tuvo que contenerse, pues recordó aquella noche, dónde un pequeño gatito chocó con ella, sin ambos saber que serían lo más importante. llevo una mano a la cara del híbrido limpiando las lágrimas con delicadeza.