Saga Restaurant -(Adaptación)- Larry, Niack y Ziam

Book#3-Liam+Zac+Zayn.-Cap.21

EN  LA  ACTUALIDAD

Zayn se había levantado temprano, estaba feliz ya que después de tres meses su hijo regresaría a casa. Recordó cuando alguien lo había alejado de su lado, al principio Zayn no quería levantar ningún reporte, pero su primo Kellan lo había hecho.

Ayer por la noche Kellan le había contado que habían localizado a su pequeño hijo, que estaba a cuidado de unos magos que eran los que lo habían localizado y que uno de sus jefes Cristiano, había dejado al cuidado de esos hombres al pequeño niño, pero les aseguró que se encontraba bien.

—¿A qué se debe que te levantaras temprano?—pregunto Jensen entrando a la cocina.

Zayn le dio una sonrisa—Iré a recoger a mi hijo.

Jensen se acercó a Zayn—¿Lo han encontrado?

—Sí. Kellan dice que hoy me lo regresaran. Además que quizás recupere mi empleo, bueno eso aún no es seguro.

Jensen le dio un abrazo, Zayn respondió al abrazo, había veces que Zayn imaginaba que era Zac quien lo abrazaba, habían pasado ya siete años desde la muerte de su pareja, pero Jensen siempre estaba al pendiente de él y su hijo.

—Ustedes dos suéltense, ya saben cómo es Kellan—dijo Aroa con una sonrisa desde el marco de la cocina, la mujer tenía un abultado vientre, ya que pronto habría un par de pequeños jugando en la casa.

Jensen se separó de Zayn, se dirigió a Aroa dándole su beso de buenos días como siempre.

—Vamos dejen de pervertir a Zayn—dijo Kellan con tono divertido, uniéndose a sus dos parejas en el beso, dejaron de besarse y Kellan miro a su primo—¿Listo?

Liam sentía tristeza porque esos serían los últimos momentos que tendría con el pequeño niño. Durante esa semana se enteró de que el pequeño pertenecía al Mundo Fairy. La muestra de sangre les dijo que era hijo de un paranormal y un humano, por ello su aroma era diferente. Pero el aroma del pequeño a Liam se le hacía familiar, sabía que lo había olido en algún lugar, pero no recordaba donde, Liam se sentía cautivado por los ojos del pequeño niño eran de un color castaños como el chocolate, cada vez que los miraba no podía evitar pensar en Zac, su pareja. Después de la muerte de su pareja se había encerrado en su habitación sumiéndose poco a poco en la depresión, así estuvo por mucho tiempo.

Un año después sus padres murieron, Liam estaba más devastado los deseos de morir crecían en él, pero su amigo Andy no dejo que eso pasara, le agradecía al hombre que no lo dejara solo, además sus hermanos y él se habían unido más de lo que antes eran.

—¿Vamos a seguir siendo amigos?—pregunto el pequeño niño, sacándolo de sus pensamientos.

—Z. Siempre seremos amigos ¿No lo prometimos?

La cara del pequeño se ilumino—Si, lo hicimos.

Liam se alegraba que el pequeño ya no se viera tan débil, había ganado uno o dos kilos en esa semana, pero ya no se veía débil. Tomando un pequeño pedazo de una hoja anoto su número y se lo dio al pequeño.

—Guárdalo. Puedes llamarme cuando quieras y no importa la hora—le dijo sonriendo, el pequeño niño lo guardo dentro de su pantalón y continúo con su desayuno.

Después de que Cristiano y Zayn tuvieron una larga charla sobre la responsabilidad de un trabajo, Zayn estaba más entusiasmado de tener a su hijo en sus brazos. Cristiano dejo que Zayn retomara su trabajo, lo llevo a una de las salas que había en las oficinas de la OCM en ella su hijo lo esperaba.

Liam levanto la vista cuando la puerta se abrió, vio a Cristiano entrar a la sala dando un paso a un lado para permitir que entraran las personas que venían con él. El pequeño niño corrió hacia un hombre de cabello negro, Liam se sorprendió al reconocer al hombre que sostenía en sus brazos al pequeño niño.

Zayn abrazo a su hijo apretándolo contra su pecho, dándole pequeños besos y murmurándole palabras de amor a su hijo, su corazón se sentía tranquilo al sostener a su hijo.

—Z, te extrañe mucho.

—Yo también papá—respondió el pequeño abrazando a su padre.

—¿Papá?— la pregunta se escapó de la boca de Liam

Zayn miro al frente para ver quien sonaba tan sorprendido y entonces lo vio allí parado estaba Liam, el hombre que le había negado su lazo, el hombre que lo culpaba por la muerte de Zac, el hombre que se aprovechó de él para que tomara esa decisión, cuando más débil e indefenso estaba. Zayn comenzó a temblar seguía abrazando a su hijo y comenzó a retroceder, tenía que alejarse de ese hombre que lo había lastimado.

Liam noto la mirada de miedo en el padre de Z, entendía esa mirada. Aquella vez que lo había visto en el centro comercial creyó que había sido solo una ilusión, pero ahora estaba frente a él y Liam quería hablar con él, pedirle perdón por lo que había dicho y hecho.

Después de la muerte de Zac su madre intento que entrara en razón por lo que había sucedido y que no deshiciera el lazo, pero él estaba enojado y molesto con el elfo, así que en ese momento no le importaba si el elfo estaba o no de acuerdo con su decisión él quería lastimar al hombre. Solo la promesa hecha a Zac lo detenía.

—¡Tío!—grito el pequeño.

Liam lo reconoció, ese era el primo del padre de Z y pareja del tío de Zac, Jensen.

Kellan le sonrió a su sobrino, la sonrisa se le perdió al reconocer al hombre que había lastimado a su primo, esquivando a las personas que tenía en su camino fue hacia Liam lo tomo del cuello, levanto la mano para darle el primer golpe, pero una mano lo detuvo. Un hombre parecido a Liam le sujetaba la mano, Kellan entrecerró los ojos como una advertencia.

—¡Suéltame!

—No. Antes tú deberías soltarlo—el hombre hablaba tranquilamente.

El pequeño niño se removió en los brazos de su padre, Zayn miro la pequeña lucha de su hijo en sus brazos.

—Z, cálmate—le murmuro a su hijo.

—Papá bájame.

—No. Y cálmate—volvió a repetirle.

—Entonces dile a mi tío que no lo lastime—el niño miraba a su padre con enfado—Él es mi amigo y mi tío quiere lastimarlo.

Kellan escucho a su sobrino y bajo su mano lentamente, dejo en libertad a Liam y con una voz cortante le dijo.

—Gracias por rescatarlo y cuidarlo. Pero esto no cambia nada—se giró acercándose a su primo, desapareciendo los tres.