Cap 13 En el paraiso

176 5 0
                                    

-Si ella dice que tú la violaste, ella tiene las de ganar, todos la creerán a ella, aunque tú digas que ella se abalanzó sobre ti...


Eiden abrió los ojos como platos ya que Marla tenía razón:


-Si, es cierto no es que casi me violas, me violaste e iré a la policía si no me dejas tranquilo, digo tranquila...


Marc se levantó de la mesa y se metió las manos en los bolsillos, se fue por donde vino, marla miro a Eiden:


-Eres una cabezona, te has acostado con tres o más chicos por unas cervezas y jamás me lo cuentas, no me lo cuentas hasta que aparecen, odias que te saque de ese marrón con el mismo teatrillo, pero siempre me lo agradeces.

Eiden trago saliva, no sabía en el cuerpo que se había metido, realmente el fuerte carácter de la chica rubia le había metido en muchos problemas, él estaba metido en esos problemas porque él era ella. Miro a Marla a los ojos y forzó una sonrisa ya que le costaba meterse en ese papel, la verdadera poseedora de este cuerpo le había explicado cómo ser, pero a él le costaba ser ella. Negó con la cabeza:


-Marla necesito estar más con mi mejor amiga y poder olvidar esta vida que tengo, seguro que si esta noche estoy sola saldré y me acostare con el primer chico con cervezas ¿Puedo estar contigo esta noche?


Era increíble pero había tenido valor para decirle aquello a la chica que quería, a la chica de sus sueños, Marla le miro a los ojos y suspiro:


-Perfecto una noche de chicas, todo sea para que aprendas a comportarte Eiden.

Eiden sonrió al escucharla y Marla se levantó de su mesa, le cogió de la mano para que se levantara:


-Vamos a comprar un pijama, sé que siempre usas ese gastado tan feo, esta vez te regalare uno....


Eiden sonrió y asintió con la cabeza y recordó el pijama que llevaba puesto cuando entro en ese cuerpo esa mañana era cierto estaba gastado y tenía muchas manchas, mas manchas tenia de las veces que se había tocado durante todo el día.
-Sí, si hace tiempo que tengo ese pijama.


Las dos chicas fueron a una tienda de ropa y Marla con su amiga fueron buscando un pijama para Eiden, encontraron uno perfecto y fueron a los probadores. Eiden en ese cubículo del probador se quitó la ropa que llevaba puesto y se puso ese pijama de tela tan ligera y suave, camiseta de tirantes y pantalones muy cortos, se vio en el espejo y si no estuviera allí con Marla seguro que se volvería a tocar. Se corrió la cortina y Marla vio como le quedaba el pijama a su amiga:


-Hija de puta tienes un cuerpo perfecto ¿Cómo lo haces?


Eiden sonrió y salió del probador:


-No lo sé será mi genes de esos.....


Marla entro en el probador y se probó el pijama que había cogido, Eiden esperaba fuera y cuando se corrió la cortina y vio a la mujer de sus sueños con ese pijama tan apretado, ella sintió que se iba, se sintió muy caliente.


-Estas perfecta Marla y yo creo que entrare en el probador para retocarme con el pijama.


Eiden entro en el probador corrió la cortina y se sentó en una silla, se metió una mano por dentro de su corto pantalón de pijama y paso se cogió un pecho, cerro con fuerza los dientes para que no se escuchara lo que estaba haciendo, se estaba masturbando nuevamente, solo por a ver visto a Marla con ese pijama.


Se corrió la cortina ella se había puesto su ropa de calle y entre sus manos llevaba el pijama:


-Bueno ya podemos irnos a casa....

El gran deseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora