Inhala, exhala.
Inhala...
Mira el horizonte. Mira a tu alrededor. Analiza lo conseguido. Piensa en todo lo que tienes y lo que tus manos trabajaron.
Piensa en las caídas, en los momentos malos y ten muy presente cómo y por qué te levantaste.
Recuerda las veces que tenias un nudo en la garganta bajando hasta el estomago.
Recuerda las veces que has tenido que aguantar las lagrimas porque pasaba más la fuerza que tenias para levantarte.
Recuerda las vueltas que te ha hecho dar la vida y el porqué a día de hoy eres la mujer que eres.
Recuerda todo lo que te ha dado la vida. Los momentos con amigos y familia. Recuerda las risas y las carcajadas.
Muy bien, ahora sonríe...
... y exhala
