Corazón de Lobo [completa]

Noche de bodas

Pronto llegó la noche, muchos seguían celebrando, las recién casadas se dirigieron a los aposentos de Kara ya que ahora sería compartido por ambas mujeres. Al llegar cada una cambio su vestido por el camisón que se usa para dormir; Lena fue la primera en entrar a la cama, mientras Kara se acercaba los reyes, la hermana y cuñada junto a las doncellas y él oficiador de la boda fueron los siguientes en entrar quedándose pegados a la pared.
Kara se acomodó en la cama sobre Lena con las cobijas cubriéndolas, la rubia fue la primera en sacarse el camisón, la mirada de ambas mujeres estaba sobre ellas mismas para no sentirse incómodas ante los testigos. La princesa heredera le quitó lentamente el camisón sin quitar los ojos de su esposa, el clitoris se comenzó a alargar convirtiéndose en un pené

—si te duele avísame

Lena no hizo más que asentir con la cabeza mientras Kara lo acomodaba en su entrada, las respiraciones de ambas golpea perfectamente a la otra y el sonido de los corazones es lo único que se escucha en aquel lugar, la ojiazul comenzó a entrar despacio en su esposa, la ojiverde enterró sus uñas en los brazos de la contraria

—¿te duele?

—solo un poco

—puedo decirles a todos que se vayan

—no, no quiero que invaliden nuestro matrimonio

—esta bien, me voy a mover despacio

—esta bien

Como había dicho la rubia se comenzó a mover con mucho cuidado para no lastimarla, eran movimientos suaves que generaban dolor pero seguía manteniendo la mirada sobre la castaña en todo momento los movimientos siguen siendo suaves durante un largo rato, los testigos finalmente las dejaron solas ya que ambas habían consumido. Afortunadamente Lena dejó de sentir dolor y comenzó a disfrutar de los movimientos soltando varios jadeos pidiéndole a su esposa que fuera más rápido quien la complacía rápidamente; estando solas la rubia comenzó a estimular los senos de su amada quien arqueó la espalda dándole mayor acceso a sus atributos, la chica de ojos como el cielo comenzó a lamer los senos de su esposa volviéndola loca.

Kara se acomodó apartando las cobijas, salió del interior de su mujer para acomodarla al borde de la cama y poder follarla de esa forma, a Lena le gustaba bastante ya que cada vez más gemía más alto y su esposa se movía aún más rápido mientras sus cuerpos creaban un ruido que les generaba querer más rápido hasta que las paredes de la mujer con ojos de esmerada apretó el miembro de su esposa mientras ambas mujeres de corrían.

                             *
Aún era de noche cuando un extraño cuerno sonó un poco a la lejanía despertando a Lena
—Kara ¿que significa eso?

—si solo es una vez es porque va a pasar una manada de lobos, dos de ellos espera la guerra se acerca...

Se escuchó una segunda vez el ruido de un cuerno poniendo en alerta a Kara para segundos después volverlo a escuchar

—¿y tres?

—un familiar desaparecido regresa

Kara sale de la cama para colocarse el camisón mientras su esposa imitaba la misma acción antes de abandonar sus aposentos encontrándose con su su hermana y cuñada en las escaleras

—¿también lo escuchaste Alex?

—si, pensé que se trabaja de la guerra acercándose

—¿crees que sea ella?

—me gustaría pensar que si Kara pero no hay que ilusionarnos

Las princesas en poco tiempo se reunieron con los reyes quienes también se miraban ansiosos esperando a que ese familiar entra en cualquier momento. Las puertas se abrieron dejando a entrar a una chica muy parecida a Kara solo que con un fleco, un vestido viejo y roto junto a su cuerpo cubierto de suciedad, la primera en acercarse fue Kara.

—¿Linda?

—Kara, finalmente

Ambas hermanas se abrazaron, la hermana mayor y pelirroja se unió poco después al abrazo mientras miraban atentamente a la recién llegada, después se apartaron para que los reyes se acercaran a abrazar a su pequeña niña y llenarla de amor; las dos hermanas le hicieron una señal a sus parejas para que se acercaran a ellas, la primera fue Kara

—Linda, esta es Lena mi esposa

—es un gusto y bienvenida de nuevo

—gracias cuñada

—Está es Samantha ella es mi esposa

—hola Linda, bienvenida

—muchas gracias a ambas

Los ojos de Linda se posaron en una de las doncellas de su madre y su mirada cambió por una de miedo e ira

—¡¿que hace ella aquí?!

—Linda, Alura es mi doncella desde que llegué aquí

—¡ella fue quien me secuestró a los cuatro años!

Todas las miradas se posaron sobre aquella mujer al igual que la de su hermana gemela
—Alura ¿que hiciste?

—son mis hijas...

—no lo son, son de la Reina Eliza

—¡son mis hijas!

—¡guardias! Llévenla a los calabozos

Astra estaba avergonzada y molesta porque su propia hermana había secuestrado a una de las princesas ¿con que razón? Era una pregunta que jamás tendría respuesta pues ya  le había dado la espalda a su hermana por lo que era una traición a la familia real

—Lois, Patricia lleven a Linda a sus aposentos

Todos regresaron a sus aposentos pero nadie pudo volver a dormir tras el regreso de Linda; las recién casadas encendieron velas para leer algunos libros o más bien Kara intentaba ayudar a Lena a que avanzara con sus estudios con relación a las ciencias que en ese momento estaban escritos en libros de historias de los primeros pobladores del planeta.