𝐂𝐇𝐀𝐓𝐒 𝐃𝐄𝐒𝐀𝐒𝐓𝐑𝐎𝐒𝐎𝐒 (PAUSDA)

04

La vida de Samuel se resumía en ir a la escuela y de la escuela a la casa, no salía por que no tenía a nadie con quien hacerlo, sus Hyungs estaban ocupados con el trabajo y Chan ocupado con su graduación, la única oportunidad que tenía para salir es cuando lo hacía con Yeji, pero esta vez no se podía ya que la niña estaba de visita con sus abuelos.

Solo había una persona que consideraba su amigo, pero eran de carreras diferentes, el chico estudiaba canto y Samuel estudia cinematografía, y ambas estaban en sectores diferentes del campus.

Samuel se encontraba sacando libros de su casillero cuando de le la nada llegó alguien y de un manotazo cerro el casillero con bastante fuerza que se ganó miradas de las personas de al rededor

—Hola— Escucho una voz femenina que ya conocía bastante bien.

Samuel decidió ignorarla y volvió a abrir su casillero, sacó su último libro y después lo cerró de nuevo, cuando estaba a punto de irse una mano en su muñeca lo detuvo.

—Te estoy hablando niño estúpido.

—¿Oh en serio? Lo lamento, ¿que necesitas?

—¿Te crees mucho princesito? ¿Como esta tu novio el Idol?

—Oh, muy bien gracias por preguntar— Samuel le sonrió y volvió a retomar su camino y pensó que ya se había librado de la chica que siempre lo molestaba.

—Sabes, aun no entiendo que te ve, un hombre como el necesita a una persona que logre satisfacerlo no un niñito tonto que ni siquiera sabe defenderse, merece a alguien c-...

—¿Alguien como tú? Realmente no lo creo— Samuel y la chica voltearon a ver al dueño de la tercera voz— Nadie, ni hombre, ni mujer, ni una persona no binaria merece a alguien que solo piensa en popularidad, que es avariciosa y envidiosa, realmente no creo que con ese tipo de pensamiento alguien quiera acercarse a ti.

—¿No tienes algo mejor que hacer Seoho? Digo, no se, como ponerte a trabajar para que puedas permanecer en la escuela... ¿Aún tienes para comer o quieres que te preste?

Los que estaban al rededor escuchando la pelea pusieron una mala cara hacia la chica, Seoho era un estudiante querido y apreciado por todos, si te metias con Seoho te metias con gran parte de la universidad.

—Ohhh ¿Ya nos estamos poniendo crueles? Bueno, dos pueden jugar el mismo juego, y dime Alice, ¿Tus padres ya te prestan la debida atención? Oh espera.... Se me olvido que tu padre se fue hace muchos años y tu mamá no te quiere— Seoho supo que había ganado la pelea, cuando vio a la chica dar vuelta hecha una furia.

Los estudiantes volvieron a lo que hacían anteriormente y dejaron de prestar atención a los dos amigos.

—¿Estas bien? Las cosas que te dijo fueron crueles— Samuel se acercó a Seoho que se debatía entre llorar y no llorar.

—Después de un tiempo te acostumbras y digo, si, esta bien que yo no vengo de clase alta como todos aquí, se que tengo que trabajar para poder llevar algo de dinero y ayudar a mis padres, pero nadie tiene el derecho a juzgar sin conocer y eso me enoja, no me entristece, por que estoy orgulloso de quien soy, no importa si tengo poco o mucho, valoro lo que tengo y eso me hace ser una persona agradecida— Decía Seoho a Samuel, aunque desde la perspectiva de Sam era como si Seoho se lo dijera a sí mismo y tratara de convencerse.

Por la mente de Samuel habían muchas maneras de ayudar a su amigo pero sabía que no iba a aceptar ninguna..... Hasta que de le prendió el foco, una de dos, salía mal o salía bien, y esperaba que todo saliera bien.

—Seoho hoy tengo que ir a dejar algo al trabajo de mi hyung, ¿me acompañarías? — Samuel hizo carita de perrito y Seoho no tuvo de otra más que aceptar.