CAPÍTULO 5

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Tony se encontraba encima del soldado brincando sobre su regazo, autopenetrandose bajo la atenta mirada de esté.

———Mierda Rogers——— aquello sonó de todo menos a una queja ———Tan grande… ——— jadeo ———Tan exquisito...——— ronroneo sin dejar de autopenetrarse ———Joder, ¡SI!——— grito una vez tocó su protesta.

*Flashback*
Ya había pasado una semana desde la primera vez que se acostaron, al principio Stark pareció no importarle lo que había pasado entre ellos, la primera noche llevó a una chica a la Torre, lo malo fue cuando esté a media noche escuchó gritos por parte de la chica, al principio pensó que se estaban peleando fuerte y sin meditarlo corrió en dirección de la habitación del genio notando que si estaban peleando, o más bien la chica se estaba quejando con Tony ya que parecía que la había echado sin siquiera hacer algo, esa noche Steve solo se limito a mirar al genio de manera desaprobatoria para después marcharse de la habitación. La siguiente noche pasó exactamente lo mismo, solo que está vez se trató de un hombre y este sí trató de sobrepasarse con el genio, claro que Steve impidió que pasara una catástrofe. Steve terminó medio herido, pero aquel hombre terminó mucho peor ya que hasta los policías intervinieron para llevárselo.

———¿Qué mierdas te pasa, Stark?——— se quejó el rubio, el genio le regaló una gélida mirada, pero en esta se podía ver algo más, parecía... ¿Tristeza? O ¿Añoranza? Aquello sorprendió al rubio.

Sin embargo Tony no le respondió, sino que fue hasta su baño y al regresar traía un botiquín, Steve entendió lo que quería hacer así que se sentó en la cama del genio, se dejó curar las heridas y golpes.

———Gracias——— susurro él genio sin mostrar alguna clase de sentimiento en su rostro, pero en sus ojos se podía ver claramente la culpa reflejado en ellos.

———No fue nada——— respondió apartando la mirada de la del genio ———Aún seguimos siendo amigos ¿No?——— el cuerpo de Tony se congeló, Steve lo miró a los ojos notando tristeza en ellos. Era la primera vez en mucho tiempo que veía los sentimientos reflejados en los ojos del genio.

———Supongo——— respondió de la forma más fría posible, aquello lastimó los sentimientos del soldado ———Ya está, puedes retirarte——— anunció para después tratar de alejarse, pero Steve lo tomó de su muñeca.

———¿Te disgusta algo?——— preguntó el soldado observando con detenimiento los ojos del castaño, esperando alguna emoción de su parte.

———No——— respondió con frialdad, eso fue más que suficiente para Steve así que lo soltó.

———Bien——— dijo mientras se levantaba de la cama ———Gracias por curarme——— fue lo último que dijo para después marcharse.

———¡Steve!——— gritó el genio llamando su atención.

Cuando Steve menos lo sintió tenía los labios del genio sobre los suyos devorándolos con mucho deseo, se tardó un poco, pero finalmente reaccionó y correspondió el beso, llevó al genio hasta su cama donde ambos se perdieron en el cuerpo de otro.
*Fin del Flashback*

Desde esa noche ambos comenzaron a perderse en el cuerpo contrario, por lo general siempre era Tony quien llegaba a buscarlo para una o varias rondas de sexo, esto no le molestaba al soldado. Todo lo contrario, cada día que lo hacían lo deseaba cada vez, hasta llegó a darse cuenta que él siempre había estado enamorado de Tony, pero siempre lo confundió con una simple amistad puesto que el genio siempre lo hacía sentir bien y especial, más que todo se tomaba el tiempo para explicarle cosas sobre la nueva época en la que se encontraba, definitivamente se había enamorado de aquel arrogante hombre...

El Síndrome HanahakiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora