Rin-sensei /ONE-SHOT/

//Parte dos//

Si tan solo te hubieras dado cuenta..

Tal vez.

Pero estoy muerto..

¿Por qué no me salvaste?...

No fuiste rápido.

¿Por qué no te pudiste dar cuenta antes?.

Por favor, eres patético.

Muere...

Estúpido.

Estúpido.

¡Estúpido!.

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Un pelinegro azabache, que usaba una máscara naranja con espirales que cubría todo su rostro, y llevaba una capa negra con nubes rojas bordadas, estaba sentado viendo a la nada aburrido y con algo de rabia.

Había tenido ese sueño de nuevo.

No había podido dormir bien, usualmente tenía mejores sueños con él, pero algunas veces no era así, y estaba de mal humor, por él sueño y por no dormir.
Lo que menos necesitaba era tener que lidiar con alguien, solo necesita paz en su mente para pensar y descansar.

- ¡TOBI! -Escuchó una voz masculina de repente, lo que ocasionó que mirara mal al dueño de la voz, claro sin ser notado por su máscara.

- Uuh, ¿Deidara-senpai? ¿para qué necesita a Tobi? -Preguntó con una voz chillona.

- Deja de ser un perezoso, tenemos una misión, hmp -Dijo Deidara con enojo y se fue de ahí.

- ¡Espereme senpai! -Exclamó Tobi y fue tras Deidara.

Habían pasado años desde ese suceso, pero claramente le seguía afectando.

En la misión de Tobi y Deidara, tuvieron que quedarse en una especie de cabaña por varios días.
Deidara dormía en la cama, y Tobi en el suelo gracias a Deidara.

Aunque, esas noches Tobi no solía quedarse ahí, a veces si, pero en otras ocasiones hacía algo diferente.

Ya era de noche, Deidara estaba acostado en la cama, y no fue hasta que se durmió que Tobi se levantó del suelo.

- ¡Kamui!.

Apareció en su antiguo hogar, Konoha, aunque dejó de ser su hogar desde que él ya no estaba.

Fue directo al cementerio, ahí estaba..

"Kakashi Hatake"

Se enojó al ver que al parecer, esa mujer se había otra vez atrevido a dejar flores en la tumba.

Agarró las flores con rabia y las aventó fuertemente, activó el kamui y apareció en el balcón de una casa.

Se quedó viendo a la mujer que dormía en el futon con odio. La odiaba; alguna vez llegó a considerarla el amor de su vida, luego se dio cuenta que solo la amaba como una hermana, pero ¿ahora? ahora solo la odiaba, deseaba matarla, hacerla pagar por lo que hizo, por arrebatarle su luz, pero era muy pronto, esperaría y la haría sufrir más.

- ..... -Vio el cuarto oscuro de la castaña, habían fotos de su nuevo equipo y otra de su antiguo equipo.
No pudo evitar quedarse viendo la foto del antiguo equipo, más en específico, al niño peliplata, tenía varias fotos de él para recordarlo mejor, aunque era claro que jamás se olvidaría de él, ni de su físico, ni personalidad, él era un.. -Bakakashi -Pensó, pero aún así, era su Bakakashi, pero no logró "llegar a tiempo".

Activó su kamui y fue a otro lugar, era una casa solitaria donde nadie había vivido desde hace años.

- Entró a la casa, le traía varios recuerdos buenos, ese era un lugar donde si podía pensar y sentirse aunque sea en un poco de paz.
Ahí antes vivía Kakashi Hatake.
Era un lugar bonito pero solitario, suponía que empezó a sentirse así desde la muerte de Sakumo Hatake..le enojaba también su yo pequeño, jamás hizo nada para apoyar a Kakashi, solo pensaba en esa maldita mujer y en ser "Hokage", que ridículo -Era tan estúpido de pequeño -Pensó mientras veía el comedor, nunca se dio cuenta de lo que sentía, y para hacerlo, perdió lo que más amaba.

Pasó un tiempo en esa casa, después se fue a la cabaña donde dormía Deidara, con fastidio se recostó en el suelo, esperando que el sol ya saliera.

Pero sin darse cuenta, se había quedado dormido.

Ne, Obito, ¿estás bien? -Obito abrió los ojos al escuchar esa voz -Si serás idiota, te dormiste a mitad del entrenamiento -Sentía como los ojos se le cristalizaban -¿Hmp? ¿Qué? ¿Vas a llorar? ¿Y ahora qué pas..? -El peliplata no terminó de hablar, Obito lo estaba abrazando con lágrimas en sus ojos.

Por favor, no te vayas, no te vayas..no te vayas -Le pedía mientras se aferraba a él.

Huh... -El peliplata lo vio por unos segundos sin decir nada -Bobo -Dijo, recostando su rostro en el cuello de Obito -¿A dónde me iría?.

- ¡TOBI, despierta!! -La voz del rubio lo despertó de sus sueños.

- Abrió los ojos de golpe y se sobresalto por el grito -¡Uy! ¡Deidara-senpai! Tobi escuchó una horrible voz que le asustó -Dijo infantilmente.

- Tienes un minuto, para agarrar tus cosas y correr -Dijo Deidara enojado.

- ¡A la orden, senpai! -Exclamó Tobi y fue directo a agarrar sus cosas -¡Apuesto que llegaré primero, senpai! -Rió.

- ¿Crees que me importa? Hmp -Dijo Deidara rodando los ojos, pero se dio cuenta de que Tobi ya no estaba.

Tobi miraba unas fotos del pequeño Hatake, estaba sentado en su habitación.

En algunas fotos, Kakashi se mostraba molesto, en otras serio, y en la minoría estaba sonriendo.

Kakashi no solía sonreir mucho, pero cuando lo hacía, era hermoso para Obito, en esos momentos no sabía porqué le gustaba tanto ver sonreir o reir a Kakashi, claro ya había resuelto su duda.

Kakashi y él no se llevaban tan bien, Obito se había jurado que lo odiaba, siempre tenían peleas, le desagradaba que Rin gustara de Kakashi, y hay tantas cosas que decir sobre la relación que ambos establecían

Quién lo diría, él resultó perdidamente enamorado de ese Bakakashi, hubiera sido mejor que se enterara mucho antes y que no pasara lo que que pasó para que la venda en los ojos se le cayera.

Se preguntaba si Kakashi hubiera correspondido sus sentimientos o ya lo hacía, aunque lo más probable era que no, pero aún así, sueña con que fuera un si.

- Kakashi..merecías más.. -Pensó.

Estaba muy deprimido, ese día se cumplía otro año sin su amor..

- Kakashi...soy un adulto..he mejorado con mis técnicas...¿y tu?..je..tu aún tienes unos miseros trece años, y estoy seguro de que hubieras sido un excelente shinobi....

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Hola.

¿Cómo están?.

Ya terminó esto.

Y pos no sé, por si quieren más de este au, estoy haciendo una historia ._.

Espero les haya entretenido.

¡Sayonara!