I

5.9K 356 6
                                    

Estaba leyendo un libro sobre magia en mi habitación, mi padre había ido a una reunión en el palacio, pues a las afueras de Obelia se rumoreaba sobre unos monstruos así que mi hermano fue a luchar contra ellos.
Se preguntarán quien soy yo, mi nombre es Tn Megellian, mi padre el duque Eric Megellian controla el segundo escuadrón de caballeros imperiales, y mi madre Sophie Megellian había Sido Nana del ex-emperador Athanasio, además ella controla todo en la sociedad.
Mi hermano Eclipse era parte del segundo escuadrón de mi padre, así que estaba peleando por Obelia en la frontera.

Eric: Tn necesito que te arregles

Tn: ¿Sucede algo padre?

Eric: irás conmigo al palacio

Ante aquello me sorprendió bastante, pues yo aun no debutaba en sociedad por lo cual no tenía permitido pisar el palacio o algún lugar de suma importancia en la aristocracia, pero, supongo que la influencia de los Megellian influia mucho.
Solo me límite a asentir con mi cabeza para ir a mi habitación en dónde mi doncella Ellie me esperaba ya con un hermoso vestido en manos, me sonrió y así otras doncellas más me llevaron al baño donde utilizaron varios productos para el cuidado de mi piel y cabello. Una vez lista Ellie coloco el vestido en mi, sin duda este se me veía hermoso, no era muy extravagante pero tampoco muy sencillo, simplemente perfecto para mí salida al palacio.
Decidí que dejarán mi cabello suelto, nunca me gustó tenerlo sujeto, así que una vez lista fui hasta donde mi padre quien ya me esperaba en la entrada con un grupo de sirvientes y el mayordomo Frank

Eric: luces bellísima Tn

Tn: gracias padre

El me ayudó a bajar los últimos escalones para así salir conmigo sujetando su barco hacia el carruaje que nos llevaría al castillo. Estaba nerviosa, sabía por los rumores que el emperador Claude era una persona frívola y que además tenía un harem con las mujeres más hermosas de Obelia, incluso había extranjeras incluso escuché que una princesa de Kovel estaba en su harem.
De tanto pensar en como sería el emperador no note cuando ya estábamos caminando hacia donde sería la reunión de mi padre, antes de cruzar hacia el pasillo de las audiencias un joven de cabellos pelirrojos y unos ojos grises interrumpió nuestro seguir

Xx: un gusto volver a verlo Duque Eric

Eric: es un placer verte de nuevo Félix

El es... ¿El caballero escarlata? Estaba sorprendida ver quién era, había escuchado rumores de su fuerza ay gran habilidad con la espada, el espadachín más joven de Obelia y un pródigo de su generación. Estaba sorprendida de verlo ahí sonriendo, mi padre me miró para después presentarme ante dicho héroe de Obelia

Eric: ella es mi hija menor Tn Megellian

Tn: u-un placer conocerlos sir. Félix

Hice una reverencia bastante perfecta recibiendo una mirada orgullosa de parte de mi padre. Félix algo nervioso correspondió mi reverencia haciendo una leve inclinación

Félix: igualmente Tn, ¿Aún no hace su debut, verdad señorita?

Tn: no... Me falta un par de meses

Félix: ya veo... En ese caso la llevaré a la biblioteca

Eric: te encargo a mi única flor, Félix

Félix: claro Eric

Dicho eso me despedí de padre con una sonrisa y un beso en la mejilla para así seguir a Sir. Félix quien ya más relajado entablaba conversación conmigo, dejando mis nervios a un lado correspondí a su plática que sin darme cuenta ya habíamos llegado a la biblioteca, el como todo un caballero abrió no la puerta dejándome pasar primero, agradecí y con asombro mire todo, sin duda leer libros era uno de mis pasatiempos favoritos así que estar aquí era como estar en el paraíso

Félix: espero sea de su agrado

Tn: lo es, gracias Félix

Félix: no hay de que, ahora sí me disculpa me iré uno momentos, puede pasearse por el lugar cómodamente

Tn: es muy amable de su parte, gracias

El se retiró dejándome sola con toda esta maravillosa colección de libros que nunca había Sido capaz de conseguir, no dude y fui por dos libros de magia, uno de protección y otro de defensa, los tomé con un brillo en mis ojos, para ir a sentarme aun lado del enorme ventanal dónde dejaba ver un extenso y lindo jardín con un columpio debajo de un árbol. No lo pensé más y salí para ir a ese lugar a leer.
Una vez afuera y ya sentada en aquel columpio podía sentir la refrescante brisa mover mis cabellos, sin duda la mejor cosa que había echo en mi corta vida.

(•••)

Había pasado ya un tiempo en los que había terminado de leer el primer libro de curación, y justo ahora estaba terminando el libro de protección, así que no tenía nada más que hacer y Félix se había vuelto a ir hacia ya una hora. Suspire para dejar el libro encima del otro aun lado mío mientras me mecía en aquel columpio con delicadeza.
Mire el cielo dejando que la suave brisa ondeara mis cabellos castaños claro, cerré mis ojos para disfrutar de dicha brisa con una sonrisa, podía sentir mis mejillas arder así que supongo me sonrojo de imaginar estar así en un futuro con mi esposo.

Mire el cielo dejando que la suave brisa ondeara mis cabellos castaños claro, cerré mis ojos para disfrutar de dicha brisa con una sonrisa, podía sentir mis mejillas arder así que supongo me sonrojo de imaginar estar así en un futuro con mi esposo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Mi Verdadero Amor.   •Claude De Alger Obelia•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora