Legado

Capitulo 33

## Centro del País del Fuego ##

Los Cuatro del Sonido corrían a través del país del fuego a toda marcha mientras que cargaban con un gran barril. Sasuke estaba encerrado dentro del barril ya que estaba avanzando su sello maldito al siguiente nivel. Empujar el sello maldito al segundo nivel es una gran carga para el cuerpo, así que Sasuke estaba dentro del barril el cual hace más lento el progreso del sello y esto en turno lo hace más seguro para el recipiente.

"Estamos siendo rastreados por un equipo de cinco shinobis de Konoha" dijo Kidomaru mientras una pequeña araña estaba parada calmadamente en la palma de su mano como si le hablara.

"¿Podemos correr más rápido que ellos?" preguntó Jirobo.

"No. Estamos cargando el barril y están acortando la distancia. Estimo que tenemos una hora hasta que nos alcancen" explicó Kidomaru.

"¿Por qué no solo nos detenemos y matamos a los bastardos?" preguntó Tayuya, pero Kidomaru negó con la cabeza.

"No tenemos oportunidad. Entre ellos está Senju Naruto, el Konoha no Raijin, un shinobi de Rango S. Es el chico rubio de la invasión, el que rompió la barrera e hirió a Orochimaru-sama. Con él se encuentran Hyuuga Hinata, la Shi no Megami, una shinobi de Rango A" dijo Kidomaru mientras todos maldecían su suerte. Podrían ser fuertes, pero no eran rivales para Orochimaru, mucho menos contra alguien que fue cabeza a cabeza con él y salió vencedor. Encima de ello tenían a una Jounin de Élite detrás de ellos.

"Genial" dijo Tayuya con sarcasmo. "¿Cómo carajos siquiera sabes eso?" preguntó.

"Si leyeras el Libro Bingo lo sabrías" dijo Kidomaru. "Después de todo nosotros los pusimos ahí".

"¿Entonces qué hacemos, imbécil?" preguntó Tayuya.

"Lenguaje, Tayuya" dijo Sakon.

"Van a atraparnos... necesitamos refuerzos si vamos a completar una misión. Le enviaré un mensaje a Orochimaru-sama" dijo Kidomaru y envió una de sus arañas que se hundió bajo tierra. "Entretanto vamos a colocar trampas para frenarlos" dijo Kidomaru y todos asintieron. Si Sasuke solo despertara de su letargo podrían correr más rápido que ellos con facilidad, pero cargar el pesado barril los estaba haciendo más lentos.

## Unas horas antes – Konoha – 5 AM ##

Era un nuevo día en Konoha y el aire ya se encontraba cálido, iba a ser otro hermoso día. "El sol estaba comenzando a salir sobre Konoha, el viento estaba soplando, las aves cantando y se podía ver a algunas personas en las calles. Era el inicio de un nuevo día en la Aldea de la Hoja.

Desde la masacre del Clan Uchiha las patrullas de Konoha caían en la jurisdicción de los ANBU. Los componentes usuales de un equipo de patrulla eran un Inuzuka con un Hyuuga para rastrear y usualmente un miembro del clan Nara y encima de todo un especialista en ninjutsu. Esto permitía que el equipo rastreara y detectara cualquier problema y si es necesario detener o asesinar al enemigo.

Actualmente un nuevo equipo se encontraba haciendo la patrulla matutina. Estaban saltando de azotea en azotea manteniendo un perfil discreto. El miembro Inuzuka señaló a su equipo que se detuviera al oler un extraño aroma.

"¿Algo mal, Jabalí?" preguntó el ANBU con máscara de serpiente.

"Olí una extraña esencia. Huele a carbón" dijo el ANBU con máscara de jabalí y el de serpiente hizo una señal para que su equipo siguiera al Inuzuka al lugar del aroma.

En menos de un minuto el equipo alcanzó el origen del aroma. Todos saltaron por las azoteas y aterrizaron en el suelo. Siguieron a jabalí y se encontraron con un conjunto de cenizas. El Inuzuka olfateó las cenizas y sus ojos se ensancharon.