No me dejes solo, por favor

25

-No estoy preparado para entrar, Tae- Jimin confesó en voz baja saliendo del coche mientras Tae cargaba con las maletas que sacaba del maletero.

Taehyung frunció levemente el ceño y arregló las maletas en su espalda y le respondió.

-No te preocupes, Jimin. Estoy seguro que tú madre y tu padre estarán muy contentos de verte, ¿por qué no te sientes preparado? Tu madre lleva mucho tiempo diciendo que quiere verte.

-Hace tiempo que no vengo aquí- explicó mirando nostálgicamente mirando su "antigua" casa.

Taehyung rió y sacó las otras dos maletas de ruedas, dándole uno a Jimin y la otra la dejó a un lado para responderle.

-Entiendo que estés nervioso, Jiminie, pero hemos venido a ver a tu familia. Está bien que hayamos venido. Todo irá bien, y lo sabes.

Jimin sonrió levemente y asintió, mirando nuevamente su antiguo hogar.

-Está bien. Vamos - dijo animado en una sonrisa yendo hacia las rejas que los separaban de la casa.

Taehyung se encargó de tocar el timbre y esperó ansiosamente a escuchar la voz de su "suegra"

-¿Quien?- la voz de la señora Park se hizo presente y Tae empezó a ponerse nervioso.

-Hola, señora Park. Soy Taehyung- respondió y un pequeño silencio se hizo presente.

-¿Taehyung? ¿Taetae?- cuestionó aún sin creer de haberlo escuchado bien.

-Si, ma

-¡Ay Dios mío!- y un pequeño sonido se escuchó entre las rejas.

Abrió la puerta y ambos entraron al jardín de la casa.

Y segundos después dos personas abrieron la puerta y la mujer salió corriendo al encuentro de la joven pareja.

-¡Jimin!- gritó emocionada abrazando a su hijo dándole pequeños besos en la frente. Y después se dirigió al peliazul. -¡TaeTae!- exclamó agarrando sus mejillas y removió sus cabellos -Pero, que hermoso eres, Taehyung. Es cierto que por videollamada es diferente. Eso no quiera decir que no eras guapo, ahora te veo en persona, es una gran diferencia.- explicó agarrando todo su rostro.

Y posteriormente llegó el señor Park tan tranquilo y saludó a los dos chicos. A ambos con un abrazo muy fuerte y sincero.

-Entren adentro, que se van a morir de calor aquí afuera- la mujer dijo y el señor Park ayudó a Taehyung a llevar alguna maleta.

-Desde que Jimin se fue siempre hemos mantenido su habitación bien limpia. Ha sido una sorpresa veros así tan de repente.- el señor Park dijo mientras la mujer ayudaba a Jimin a arreglar el armario.

-Queríamos avisar, pero al final decidimos que fuera una sorpresa.

-Eso es bueno. Ambos estábamos ansiosos por veros. Y a ti por conocerte.- sonrió ampliamente -Pareces un chico muy agradable. Desde antes y ahora.

-Gracias, pa- sonrió en una enorme sonrisa cuadrada y adorable a los ojos del adulto.

Una pequeña mano tocó levemente el hombro del peliazul y éste se giró, ya sabía de quién se trataba.

-¿Qué ocurre, Jiminie?- le preguntó y éste le miró con ojos enormes, eso significaba que quería algo.

-¿Puedes ayudarme a arreglar las cosas?

-Claro baby. Me entretuve con tu padre, lo siento- se disculpó y abrió las maletas restantes.

Ambos jóvenes se habían llevado 5 maletas. 2 de ellas eran de Jimin y las otras 3 de Tae, pero una de ellas estaba vacía, porque tenía pensado llenarlo cuando fueran a la ciudad.

Los padres miraron a la joven pareja y salieron de la habitación para darles su respectiva privacidad.

-No- negó rotundamente al escuchar lo que Taehyung le pidió.

-¿Por qué no? Vinimos a eso, Jimin. Quiero ver la ciudad. Porfa~- suplicó entre pucheros.

-Yo no quiero ir, Tae. Si quieres ve tu solo.

-No conozco la ciudad más que tu, Jimin. Por favor- pidió nuevamente intentando convencerlo mediante besos.

-Está bien, está bien. Iré contigo- dijo rendido, riendo por las cosquillas que empezó a hacerle el menor. -¡Ya~Taetae~!- gritó entre risas, suplicando por su vida.

Y el moreno le hizo caso, robándole un beso por el camino.

-¡Gracias!- exclamó en aquella sonrisa cuadrada tan linda que Jimin le devolvió el beso y lo abrazó.