Sunghoon tuvo que pensar mucho que respondería a Sunoo. Tenía mil cosas rondando por su mente, no dejaba de pensar en la conversación de su padre, en los momentos que había pasado con Sunoo, en lo feliz que lo hacía, pero a la vez, no podía no pensar en lo triste que Jeongin se había sentido solo con el hecho de que Sunoo se llevara sus cosas del departamento
Si aquello lo había dejado tan mal, no podía imaginarse como se pondría cada vez que Sunoo vaya a verlos a Italia y luego deba viajar de vuelta a Francia para no volver a verse en un largo tiempo. Eso lo destrozaría
—Entiendo que estés confundido, Sunoo, no te culpo, estás en una situación difícil —guardó silencio, sabiendo lo que debía decir, mas se le hacía difícil, sentía que le costaba hablar —Y en serio odio tener que hacerte esto, pero tienes que decidir. No puedes estar allá y acá
Sunoo sabía que tenía razón, sabía que no podía irse a Francia y estar volviendo siempre, no sería justo, no sería justo para Sunghoon, para Jeongin, ni siquiera sería justo para Heeseung, pero se sentía incapaz de tomar una decisión
—Si elijes seguir con Heeseung, irte con él a Francia, arreglar su matrimonio, yo lo entiendo
Y aunque era bueno, Sunoo no agradeció que Sunghoon fuera tan maduro con la situación, porque no volvía la decisión más simple, que fuese tan comprensivo solo hacía que sintiera más ganas de quedarse con él.
—Te amo, Sunoo, te amo muchísimo, pero no voy a pedirte que rompas tu matrimonio por mi —habló, finalmente le había dicho que lo amaba, y la verdad, sentía que se había quitado un peso al confesar aquello
El silencio reinó en el departamento otra vez, aquella era una conversación difícil de tener incluso cuando ambos ya eran adultos. Tal vez hace unos años, cuando ambos eran jóvenes, Sunoo no hubiera dudado en elegir, y Sunghoon hubiera estado seguro que Sunoo lo elegiría, pero ahora nada era seguro, otra vez, no se podían dar el lujo de ser caprichosos, egoístas, no solo estaban jugando con sus propios corazones
—En algún momento fuiste mi prioridad, Sunoo, pero ahora mi prioridad es Jeongin —dijo entonces, era duro pero era la verdad, él debía velar por Jeongin ahora, porque sus decisiones afectaban al pequeño también, ya había notado eso —Él te quiere tanto... Y si tu plan es ir y venir, ser intermitente en nuestras vidas, si no puedes decidir... Entonces seremos Innie y yo quienes tendremos que alejarnos
Aquello fue duro de decir, las palabras parecieron quemar su garganta mientras salían, pero a la vez, por más tristeza que le diera, sabía que era lo correcto, debía cuidar el corazón de Jeongin por sobre todas las cosas, esto no se trataba de él y Sunoo, se trataba de su hijo y su estabilidad, su corazón
Si él había tomado la decisión de adoptar a Jeongin era porque estaba dispuesto a ponerlo a él ante todo, incluso en situaciones como aquella, e iba a cumplir con aquello
—El corazón de Innie es mi responsabilidad, y espero que entiendas que como padre, él es mi prioridad ahora, ni siquiera yo mismo —dijo, y se atrevió a alzar su mirada, encontrándose de inmediato con los ojos llorosos de Sunoo
El menor asintió, no lo culpaba, al contrario, lo entendía, sabía que él estaba siendo egoísta al querer tener dos vidas, que estaba siendo pretencioso al creer que podría dividirse entre Sunghoon y Heeseung sin que nadie saliera dañado
—Lo entiendo, Sunghoon, en serio que lo hago —dijo con una sonrisa triste
Si, a Sunoo le hubiera gustado que aquellas no fueran las palabras de Sunghoon, hubiera querido que le dijera que resolverían aquello, que encontraban una forma de estar juntos aunque él esté en Francia, pero a la vez sabía que Sunghoon estaba haciendo lo correcto, debía cuidar a Jeongin de todo, incluso si eso implicaba cuidarlo de él
—No pude cuidar de tu corazón hace años, Sunoo —habló con sus ojos llenándose de lágrimas mientras su mano buscaba la cálida mano del menor —Te fallé... No puedo fallarle a Jeongin también, yo... no quiero fallarle también. No puedo dejar que su corazón salga lastimado
Aquello apretó el estómago de Sunoo, quien también tenía sus ojos llenos de lágrimas, las cuales ya corrían por su rostro. Se sentía mal, culpable, pues era él y su indecisión los que habían puesto a Sunghoon en aquella situación
Había estado tan pendiente de él mismo y la decisión que él debía tomar que no se había dado cuenta que había puesto a Sunghoon en una encrucijada también, y aquello no era lo que quería
—Jeongin comienza la escuela mañana, decidimos quedarnos a vivir en Verona, por lo menos los próximos años, así que compré este departamento —contó Sunghoon entonces, tras un largo silencio —Y por más que me encantaría rogarte por que te quedes una última noche, Sunoo, que te quedes a mi lado, que hagas una vida conmigo, ambos tenemos decisiones que tomar
—Lo entiendo...
—Debes elegir, Sunoo. Ve a tu departamento y elige. Puedes armar tus maletas, aún tienes tiempo, y puedes irte con Heeseung, pueden empezar una vida nueva desde cero, pueden hacer borrón y cuenta nueva, hacer como si nada hubiera pasado...
Sunoo lo interrumpió, sintiendo como el nudo en su garganta era cada vez más grande —No quiero tener que empezar de cero...
Ahora fue Sunghoon quien lo interrumpió —Pero debes hacerlo, tendrás que hacerlo si decides irte
Silencio otra vez, sabían que esa conversación estaba cerca de terminar, pero ninguno se atrevía a ser quien la terminara, pues ambos sabían que cuando aquella conversación acabara, Sunoo tendría que irse del departamento, y podría ser la última vez que se vieran
Entonces fue Sunghoon quien se atrevió a terminar con la conversación, entendiendo que con tenía sentido intentar evitar aquel momento que era inevitable al fin y al cabo
—Si no vuelves mañana por la mañana sabré que elegiste a Heeseung, Sunoo. Te prometo que si eso ocurre no habrán rencores, solo te pido que... Te alejes, no vuelvas, no le hagas eso al corazón de Jeongin, no le hagas eso a mi corazón
Ya no había nada que decir, todo lo que podría hacerse dicho ya había sido dicho, y ahora a Sunoo no le quedaba más que irse. Se levantó entonces, dejando la copa en la barra, y acortó la distancia entré él y Sunghoon
El mayor no lo esperaba, pero Sunoo había unido sus labios por cortos segundos. Había sido apenas un roce, tal vez ni siquiera podría considerarse como un beso real, pero era lo más que Sunoo podía darle, y Sunghoon estaba dispuesto a recibirlo por más pequeño que fuese
Se había sentido como un beso de despedida, y muy probablemente eso había sido, pues tras aquello, Sunoo simplemente tomó sus cosas y abandonó el departamento, tal vez para siempre
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2. LIKE A MEMORY - SUNGSUN
Fanfiction"La pintura nunca le pertenece a quien la ha pintado, desde un principio es de quien ha logrado inspirarla, por eso evocan tantos sentimientos una vez que están listas ¿Lo sabías?. Por eso esta pintura te pertenece, Sunghoon, siempre te ha perteneci...