Solamente sabía contar. Contar horas que día a día invertía el resto en producir y producir. No importaba el corazón, o pensamientos de los demás. Demás personas que le recordaban que él que estaba programado para lograr el mayor provecho de la vida de la gente. Gente, sí, esa gente que también tenía vida, familia, y pensamientos. Pensamientos que para él eran completamente ajenos y por más que lo intentaba, no lograba comprender que significa amar, reír, llorar. Pobre autómata. #hombredehierro
📸: Película "Órbita 9"
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Cyberpunk en 500
Ciencia FicciónColección de microrrelatos en la era de la información.