Capítulo 3

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Ni siquiera era la hora de entrada aún ¿por qué esta odiosa mujer la estaba molestando?

–Alexis querida, abrimos temprano hoy y nadie se ha dignado en aparecer, necesito que vengas rápido a ayudarnos con las mesas

–¿Acaso tengo opción?

–¿Disculpa?

Ups, lo dije en voz alta.

–Voy en camino señora Lasserre

–Perfecto, cuento contigo, date prisa por favor

Bien, todas las esperanzas de tener algún otro aperitivo se habían ido con esa llamada, se resignó junto a su estómago insatisfecho y sostuvo su bolso impermeable para comenzar a caminar lo más rápido posible a lo largo de las seis cuadras que le restaban hasta su trabajo.

–¡Dios mío al fin llegas! -exclamó una mujer joven de piel levemente bronceada, alta y esbelta que fácilmente podría pertenecer al grupo de modelos de Victorias Secret, caminaba de un lado a otro ajetreada escribiendo cosas en una agenda mientras hablaba por su móvil ¡vaya que polifacética!- ¿qué haces ahí parada niña? ¡ve a cambiarte rápido!, ¿por qué será que todos están llegando tarde hoy? -gruñó con dosis de estrés tapando la bocina del aparato para que quien sea que esté detrás de la línea no descubriera su ogro interior-

Seguro señora... ¿necesita ayuda en algo más?

–Por ahora haz lo que te pedí y ve a atender las mesas -suspiró-

La castaña simplemente asintió sin dejar que su pésimo humor la contagiara, el día aún estaba en su pleno apogeo y había mucho por hacer como para frustrarse tan temprano.

Una vez cambió sus ropas por el prestigioso uniforme de camisa negra manga larga abotonada y delantal, con lapicero en mano y su fabulosa agenda tapizada en cuero salió de los vestidores lista para darlo todo.

Antes de cualquier cosa se asomó como de costumbre en el cristal de la cocina para saludar a dos de sus colegas que estaban como locos dando vueltas con especies y verduras en las manos, el chef en jefe no había llegado y ya se imaginaba el gran lío que eso debía suponer.

Con fuerza de voluntad y sin tener alguna otra opción se dirigió hacia las mesas escaneando a todas las personas en el sitio en busca de alguien quién necesitara su atención, muchos ya estaban comiendo o charlando con una copa en mano, todos los lugares parecían ocupados y había una larga fila tras la casilla de recepción. Observó un gesto a su diestra; una joven pareja que no había sido atendida le llamaba desde lejos.

–Buenas tardes, bienvenidos al Lasserre Restaurant encantada de servirles ¿puedo tomar su orden?

–Seguro flaca, quiero dos platillos de Vol Au Vent como entrada acompañado de un cóctel Libertino y alguno otro similar pero no tan fuerte... -la joven rubia y elegante le miró con detalle y sonrió cálidamente- ¿tú cuál me recomiendas?

–¿Un French Martini quizá?, en lugar de limón es a base de zumo de piña y licor de mora lo que le da un sabor mucho más sutil

–¡Perfecto! Quiero ese exactamente -afirmó con emoción, a pesar de que aparentemente a su acompañante le importaba más lo que estuviera tras su teléfono que su cita-

–¿Desea las bebidas antes o con la comida?

–Ya mismo por favor

–De acuerdo, ¿desea algo más?

–Es todo por ahora

–Perfecto... -Alexis miró alrededor discretamente, había solo una compañera más atendiendo las mesas y debido al gran caos en la cocina intuyó que necesitarían más tiempo de lo habitual- el día de hoy tenemos muchos clientes así que su pedido saldrá en aproximadamente 50min, una disculpa de antemano, por favor disfruten su velada

What is Love? | @mybbjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora