Cuando éramos un equipo.

131 15 0
                                    

Aún recuerdo cuando éramos un equipo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Aún recuerdo cuando éramos un equipo.

Solíamos ayudarnos en las labores del hogar; siempre te quejabas de lo difícil que era retirar la comida de los platos de porcelana que teníamos, y terminabas con cayos en los dedos por usar tanto la esponja.

Teníamos un cierto chiflido para identificarnos; no necesitábamos gritarnos, pues cada que nuestros labios se juntaban para silbar, corríamos a atendernos.

Buscábamos conchitas de mar cada vez que salíamos a la playa de Kagoshima, te encantaban las que llevaban colores, y a mis las huecas.
Siempre terminábamos trayendo una cubeta llena de ellas para decorar la pecera de Nemo, nuestro pez.

Navegabamos por los cientos de sitios en internet para distraernos; siempre terminábamos viendo series animadas, o algún documental de animales en peligro de extinción.

Jugábamos con coqueteos discretos, llamando la tención carnal de cada uno para después terminar entre las sabanas, la alacena o el sofá;

Aprendíamos a cocinar en casa de tu abuelo; siempre te regañaba por comerte las sobras del cucharón.

Aprendíamos a bailar en nuestro apartamento, sin embargo, nunca fuimos buenos en eso, por lo que nos rendíamos a mitad de cada canción.

Asemejábamos los celos; y aunque yo solía ponerme celoso con frecuencia, al final me enseñaste a confiar en ti, dejando de lado los celos sin sentido, abriendo paso a una nueva confianza, a tal grado de ser libres en elegir amistades femeninas y masculinas. Siempre con la distancia que los amigos se merecen.

Repartíamos palabras melosas; tú siempre me dijiste que las mías eran las mejores, pues podía escribirte todo un párrafo narrado de sentimientos que salían de mi corazón.

Escribíamos mensajes a cada minuto cuando tú te ibas a Kagoshima, nos mandábamos audios con cualquier oración solo para poder escuchar nuestras voces, nos llamábamos con cualquier pretexto solo para hablar por horas, nos mandamos fotos para sacarnos sonrisas con nuestras cursilerías.

Cantábamos en el hogar, en la calle, la ducha, el carro y la cama; nos encantaba entonar cada canción dedicada, y aunque éramos jóvenes con gargantas en desarrollo jamás nos criticábamos.

Conciliaba tus sueños; cada vez que te cantaba mientras acariciaba tu negra cabellera, o cuando masajeaba tus hombros después de un día pesado de preparatoria.

Nos dábamos apoyo en cada ataque de ansiedad; yo te contaba los segundos para respirar, te preparaba té de manzanilla y te susurraba al oído: Todo va a estar bien. Y tú, tú solías acariciar mi cabello mientras acercabas mi chocolate favorito para después decir: Estoy contigo.

Amábamos con tanta intensidad, que temía caer tan profundo y no volver a salir; sin embargo mi corazón se adapto al inmenso amor que teníamos, y el cariño no tardo en arropar mis temores.

_Mikey.Sano_: Te ha enviado un mensaje.

_Mikey.Sano_: ¡Somos un gran equipo! Deberíamos hacernos camisetas que digan: Equipo dinámico ✨Maitake✨

Éramos un maravilloso equipo, estábamos el uno para el otro, compartíamos cualquier cosa, y manejábamos las cosas con todo el debido respeto que nos merecíamos, elaborábamos actividades que nos dejaban exhaustos para pasar los días aburridos, estudiábamos en compañía los fines de semana y ni hablar de las salidas nocturnas al supermercado.

Nunca me hiciste menos por ser dos años menor que tú, nunca me despreciaste ni mucho menos me dejaste atrás, siempre éramos TÚ Y YO.

Manjiro, cuando éramos un equipo nada nos preocupaba; solíamos presumir ante los siete camaradas que nos seguían a todos lados, dejándolos fastidiados cada vez que entonábamos nuestro famoso eslogan, sin embargo, terminábamos sacándoles carcajadas con nuestras ocurrencias; los meses pasaban y nuestro amor se acrecentaba más, los recuerdos se guardaban y nuestra confianza se fermentaba, pero supongo que toda esa dependencia nos llevo a la desagracia.

Manjiro tú unión me dejo recuerdos.

Manjiro tú unión me dejo vulnerable.

Manjiro tú unión me dejo protegido.

Manjiro tú unión me dejo dependencia.

Manjiro tú unión me dejo tormentos.

Nos convertimos en un equipo sin sentido y con un nombre bastante entrañable: "Equipo dinámico Maitake" nos solíamos llamar, siempre fuimos infantiles, nos gustaba juntar nuestros nombres para después pasarlos a corazones deformes en las libretas, nuestra dupla fue una perdición, nuestra unión fue una ilusión, nuestra confianza fue un pasatiempo y nuestro equipo fue un desorden... El desorden que dejaste.


~♪


Disculpen por cualquier falta de ortografía.
Espero y les guste una disculpa por no haber actualizado.
Adaptación el desorden que dejaste......

NicoleRodriguez616

El desorden que dejasteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora