Despedida de soltero [ZhanYi]

La propuesta, el dolor y el descubrimiento.

Yibo despertó horas más tarde, sobre el frío suelo y con una mano abrazándolo por la cintura.

Ronquidos suaves fueron los que lo regresaron a la realidad. Una realidad dónde él se había acostado con su cliente rompiendo así su propia regla de oro.

Y lo peor de todo es que no era un cliente común y corriente, más bien era... EL CLIENTE.

Intento moverse un poco, pero la fricción contra el pene del hombre que estaba a su lado desnudo le provocó escalofríos en todo su ser.
Aun estaba sensible, si se movía un poco, su zona afectada dolería por las estocadas bestiales que el pintor se encargó de darle para llenarlo por completo.

Zhan sintió como alguien se remolineaba en sus brazos, por lo cual despertó con la gloria de los glúteos del exquisito bailarín tan cerca de su pene.

No hubo culpabilidad. Las copas de alcohol no eran culpables tampoco, ni siquiera el pecaminoso cuerpo del hombre entre sus brazos tenía la culpa, porque el pintor sabía muy bien que la pasión y la lujuria lo dejaron ciego.

El joven bailarín no sabía que el hombre detrás de él, había despertado, así que movió su mano hasta donde reposaba la del joven y quiso moverla.

-¿Piensas huir como Cenicienta?- escucho cerca de su oído.

-Yo...- su voz sonó cansada. No tenía alientos de hablar y mucho menos después de lo sucedido, porque él si se sentía culpable.

-Sabes que después de esto nunca jamás nos volveremos a ver- comentó el pintor mientras que su mano hacia leves caricias en el abdomen plano del bailarín.

-Mph...- asintió. -Lo tengo en cuenta. Solo era algo de una noche.

Zhan siguió acariciando el cuerpo del rubio, hasta que su boca beso el hombro del bailarín.

-¿Qué... Está haciendo?- cerró sus ojos y dejo que un suave gemido saliera de sus labios cuando Zhan tomó su pene flácido y lo sacudio.

-Una despedida. Si nunca más nos volveremos a ver. Al menos podemos...

-No- negó el chico que se estremecía bajo su toque. -Estoy fuera de esto...- dijo suspirando. -Aunque lo deseé, mi cuerpo no podría soportar más... Esto fue mi primera vez, no estoy acostumbrado a que un objeto de su tamaño entre en mí- mordió su labio y sintió como Zhan en vez de retirarse se acercó más a su cuerpo.

-Sin intromisiones.

Yibo lo pensó nuevamente. Zhan era todo un caballero para preocuparse por el dolor que le causaría nuevamente si se abría paso en su trasero.

-Ni siquiera estoy seguro si puedo levantarme...- cambio su posición y se recostó completamente en su espalda, mientras que Zhan quedó en una posición de medio lado.

-¿Tan duro fuí?- para obtener una mejor visión del cuerpo desnudo del rubio, Zhan apoyo su cabeza en la palma de su mano mientras que su codo sostenía su peso.

Yibo sonrió sonrojado. Ni en sus más locos sueños imagino al pintor a su lado charlando cómodamente después de tener sexo con él.

Zhan sonrió. Déjame devolverte todo lo que ayer me hiciste sentir.

El bailarín quería poner fin a eso que apenas surgía, pero fue imposible, Zhan se colocó sobre él y tomó sus mejillas para besarlo con dulzura.

No fue igual que los besos desenfrenados de hace una horas, está vez fue diferente.

Zhan repartió un par de caricias con sus labios en su cuello, luego de eso bajo exactamente por dónde el tatuaje temporal estaba desapareciendo.

Yibo arqueo su espalda en cuanto el mayor llegó hasta su ombligo y enterró en ese lugar su lengua.
Tomo los cabellos azabaches del pintor entre sus dedos y tiro de ellos.