PROM NIGHT 本 KOOKMIN MINI FIC

02

Jimin parecía repeler a Jungkook en todo el sentido de la palabra. Al principio, Jungkook pensaba que había sido una simple casualidad el hecho de que Jimin no hubiera sujetado su mano como todas las mañanas cada vez que charlaban desde la entrada del instituto hasta el salón de clases. Pero luego, se volvió más notorio cuando, en lugar de sentarse junto a él en la cafetería durante el primer receso, Jimin se sentó junto a Haek. Jimin estaba siendo igual de amable que siempre, no era como si lo estuviera ignorando o excluyendo de sus conversaciones, sin embargo, se limitaba al contacto físico entre ambos.

En el segundo bloque, Jungkook sintió que su corazón se encogió cuando en clase de ciencias, sus manos se rozaron y Jimin al percatarse, quitó las suyas de inmediato. Para otros, tal vez no era algo notorio, pero Jungkook estaba tan acostumbrado a interactuar con Jimin mediante ligeros toques, que le descolocó demasiado que Jimin los estuviera evitando. Sabía que el hecho de que no hubiera contacto físico entre ambos, era algo por lo que debía preocuparse, pues era su manera predominante demostrar su cariño por el otro y que no estuviera presente no le daba buena espina.

El resto de la jornada transcurrió y aunque Jungkook intentó varias veces llegar a Jimin, Jimin siempre mantuvo su distancia.

Y aquello, hizo sentir a Jungkook como una persona miserable.

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Por la tarde, Jimin volvió a ser el mismo Jimin de siempre. Llegó a casa de Jungkook a eso de las cinco treinta y luego de discutir con Heejin por un tema completamente trivial, subió a la habitación de Jungkook y se tumbó junto a él sobre el edredón azul marino que cubría la cama, entrelazando sus brazos antes de comenzar a contarle sobre el último capítulo de la serie que veía con su madre. Jungkook se sintió aliviado por volver a tener a Jimin siendo cariñoso junto a él, pero no podía dejar de pensar en lo que había ocurrido durante el resto del día. Por lo cual, cuando Jimin terminó de hablar sobre la serie, Jungkook no tardó en preguntar al respecto.

—¿Estabas enfadado conmigo esta mañana?

Jimin frunció el ceño.

—No —no dudó en responder—. ¿Por qué? ¿Debería estarlo?

Jungkook se acomodó sobre la cama, sentándose con las piernas en forma de flor de loto mientras miraba a Jimin, tumbado con la espalda pegada al colchón, mirándole de manera curiosa. Desde ese punto de vista, con la luz del atardecer colándose a través de la ventana mientras se posaba sobre él, Jimin lucía precioso ante los ojos de Jungkook. Sus iris color miel parecían ser un sin fin de motas doradas y su cabello azabache hacía relucir su piel pálida de una manera etérea. Jungkook no fue consciente de que había estado todo el rato con la mirada fija en Jimin hasta que Jimin sonrió de manera tímida en su dirección.

—Me refiero —Jungkook apartó la mirada de Jimin, clavando su vista en el edredón azul marino con el que jugueteaba en sus manos. Luego añadió—: Parecías evitar cualquier contacto conmigo.

—Te hablé durante toda la mañana.

—Sabes que no me refiero a eso, Jimin.

Jimin se acomodó en su lugar, sentándose de la misma manera que Jungkook. Suspiró antes de responder.

—¿Qué está mal contigo, Jung?

—¿Qué?

Jungkook preguntó, genuinamente confundido.

—Ayer me has dicho que te sentirías mejor si los rumores disminuyen, es por eso que evito ser afectuoso contigo en el instituto —Jimin dijo como si fuera obvio su punto—. La manera en que demostramos nuestro cariño por el otro ha sido lo que ha dado pie a los rumores, me pareció lógico que para cortar con los rumores, debía cortar con el contacto físico. Era lo que querías ¿No?