Érase una vez un niño que estaba caminando por la calle de Tui de repente le salió un ladrón y lo mató. Ese ladrón se llamaba matador y era muy famoso porque iba por las calles y mataba a personas porque le daba la gana. Un día que iba caminando por la calle, se encontró a dos policías que decían: tenemos que encontrar a ese asesinato o si no irá matando por ahí y bueno, nos despedirán. ¿Pero cómo lo hacemos? Yo creo que lo mejor será tenderle una trampa. Al día siguiente los dos policías salieron de sus casas, el matador los vio, pero se fue corriendo porque sabía que le iban a intentar tender una trampa. Los dos policías pensaron, pensaron y pensaron y dieron con la solución. Iban a hacerse pasar por sus cómplices y así intentar detenerlo.
Continuará.......