Ser pintor se me está volviendo difícil Karen, el señor Eduard insiste en que no son buenas para su exposición y mi último cliente rechazo mi trabajo a pesar de que ya estaba terminado, apenas puedo pagar la luz y mi comida. No paro de pensar en ¿cómo sería mi vida si hubiera hecho caso a mi padre?, siempre me insistió a que fuera médico, con esto de la guerra terminar los hospitales están llenos de pacientes, te acuerdas de Juan, ahora cobra millones porque está haciendo de doctor privado para el hijo del señor Colon, la guerra ayudó a algunos y a otros nos está matando, aun después de terminar, nadie me quiere comprar mis trabajos, ya muy pronto no habrá espacio aquí en mi habitación para unos cuadros más, no me he bañado hace dos días, cene un pan con agua saborizada, al señor de la renta le debo dos meses y estoy hablando con una muda.
La joven que parecía de 20 pero en realidad probablemente tenía más, frunció el ceño y entre movimientos con sus manos explico-- que no pueda hablar no significa que no te escuche.
Lo sé, pero me pesa tanto –dice entristecido para luego mover las manos y explicar en señas --extraño los días en que me gritabas que lavara la ropa. Tengo un mes que no la lavo.
Al escuchar eso la chica puso una expresión de enojo. Agitada comenzó a mover las manos, movía sus labios con firmeza y velocidad pero más rápidos eran los movimientos de sus manos que parecían gritar-- TIENES QUE LAVAR TU ROPA¡
Si... no tiene el mismo efecto
La chica no aguanto más soltando su mano y arremetiéndola contra la cabeza del señor, aunque parecía más joven que él, sus comportamientos declaraban todo lo contrario, ella parecía su madre o como mínimo su hermana mayor.
Ai tampoco me golpees, la lavare hoy en la tarde, tengo que salir a una reunión.
... ella mantuvo silencio, su alegría subió en picada, su enojo se había borrado, no movió sus manos para felicitar, hace poco había perdido la capacidad de hablar tras un ataque a un banco en el que ella trabajaba, uno de los ladrones la había tomado de rehén y cortado el cuello, esto porque los policías habían disparado a uno de ellos, ella se salvó de milagro, salió por todas las noticias y estuvo en recuperación durante mas de 4 meses, aun así, ella era callada desde muy pequeña, así que el no poder hablar ¡, no le ha afectado en gran manera, al contrario, el no tener la obligación de responder la hace sentir más libre, así que ella decidió no felicitar, solo abrió los ojos con sorpresa y espero a que el señor respondiera a esto, el mismo la miro en silencio por unos segundos, esperando una felicitación que no recibió, así que suspiro algo decepcionado y dijo.
No, no te emociones, no me invitaron, pero Dany me hablo de ella, hablarán de negocios, algunos inversionistas pondrán millones en negocios en la ciudad, su frase promocional es "por el desarrollo posguerra"
La chica que se mantenía silenciosa pero atenta reacciono con una sonrisa burlona al escuchar esto, el hombre que momentos atrás compartía en el mismo sofá que ella, abandonaba la sala dirigiéndose a la una de las habitaciones.
Si, lo sé, es una pésima frase, pero no voy por ella, tengo una idea super buena
Tras decir esto el señor se mantuvo en silencio, la chica no respondió, ya que no podía hablar y el señor no podía verle así que aguardo en silencio en ese sofá, de color verde algo viejo, en frente no muy lejos de una televisión llena de polvo, como si llevaba meses sin usar y una mesa pequeña justo en frente de la joven donde reposaban unos libros aparentemente de ella, dos tazas de café una al medio beber y la otra vacía solo con el residuo de lo que en algún momento fue un café negro. El hombre por su lado se cambiaba de ropa, con rostro impotente, sabiendo que no le aceptarían, sintiéndose miserable al comenzar a abotonar la camisa se miró al espejo, y comenzó a ver sus canas, su falta de pelo que era más por el estrés que por la edad pero que el asociaba a la pobreza, se miraba y juzgaba su cuerpo, que era gordo, su pansa estaba mas grande eso seguro porque tenia mas de una semana que no salía a caminar y el rededor de sus ojos estaban oscurecidos y con arrugas, delataban sus largas horas de trabajo pintando aquellos detalles que cree él, serán valorados.
Al salir de la habitación vemos de nuevo a ese hombre sonriente que busca aparentar bienestar a pesar de los tormentos que lleva consigo.
Mi idea- grita- mi idea es revolucionaria, si lo piensan bien no dudarán en invertir en ella, y cuando sea rico tu y yo nos iremos a de viaje, conoceremos y hablaremos con chicos extranjeros y guapos, podemos ligar y sin el miedo a que dirán pues solo estaremos de paso.
La chica se ríe, porque eso que el hombre dice suena fantástico, y aunque ellos saben que no será una realidad sonríen y asienten como si de una promesa se tratase, una promesa que no planearan cumplir.
Tras hablar de cosas básicas, como la alza de los precios, la falta de empleos, la ropa a la moda, comentar los libros que traía Karen y los sueños perdidos en el pasado, la chica se levantó, hico un pequeño movimiento con el cuerpo como signo de que se iba y que deseaba felicidad al señor no mayos a los 45 que quedaba en la habitación solitaria llena de cuadros y sabanas que cubrían pinturas sin enmarcar, un tapis antiguo y manchado una tele del año pero que parecía otro artefacto de decoración que era más inútil que el florero el cual tenia algunas rosas blancas y amapolas moradas con agua limpia y un pañuelo que rodeaba al frasco con delicadeza, justo detrás una montaña de libros que al igual que la televisión parecían no haber sido usado en años y un señor envejecido no por sus años si no por la vida que parecía feliz pero que no podía esconder ante los ojos de ella y de nosotros su sufrimiento, cerró la puerta y dejándonos melancólicos y algo culpables porque sabemos cómo sabe Karen que nada podemos hacer por él.
El hombre que había quedado en la habitación miró hacia atrás y suspiro porque sabia que debía buscar la forma de vender algo para pagar el alquiler o por lo menos abonarlo, así que descubrió de las sabanas una pintura hermosa de una mujer blanca con mirada firme pero a la vez dudosa, miraba hacia un lado, se veía temerosa, pero segura, algo que en la pintura se marcaba, era un contraste que te pondría a admirar aquella pieza de arte durante horas y no encontraras aun, como pudo el pintor plasmar tal expresión.
Salió a la calle, no se veía preocupado, los vehículos pasaban rápidamente, uno tras de otro, lo que no era raro, estaban en la ciudad corazón new york, justo una semana de acabar la guerra, las calles eran un caos, la gente andaba perdida en la felicidad y algunas en sus sufrimientos, el señor presencio en su camino a la reunión 6 accidentes donde 5 de ellos parecían ser fatales, no estaba seguro, porque al igual que los demás perseguía un sueño que lo ahogaba en sufrimiento, que no le dejaba empatizar y ayudar, hasta que vio un joven con alrededor de 17 a 19 años, este estaba sonriendo mientras veía algo del periódico, el señor embelesado por la belleza del joven, comenzó a caminar más despacio según se acercaba viendo su bella sonrisa y su ropa coloría, muy contrario a lo que se veía en esas calles, es entonces que el joven se dispuso a cursar la calle, el señor intrigado por la ruta que tomaría el joven y adonde iría al final de la misma, decidió cruzar la calle justo detrás de él, nada malo pasaba, el paso del joven era rápido, sostenía su periódico con seguridad, no se daba cuenta de que alguien le decidió seguir meramente por su belleza, hasta que de la nada el joven se detiene por unos segundos, sorprendido.
--mi revista—grito.
Revista? Que acaso eso que tenía en sus manos no era un periódico, lo que sea que fuese salió de sus manos haciendo que el joven segundo después corriera hacia atrás tratando de recuperarle, el señor vio la acción, fue el único que lo noto, las demás personas siguieron su camino.
Existe una frase, un segundo, es un segundo, pero en tan solo un segundo, se puede perder mucho, amores, riquezas, "en un segundo, se puede perder la vida"
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PINTOR Con + De Cuarenta (en pausa)
RomanceDespués de la segunda guerra mundial los artistas se ven obligados a abandonar su sueños y trabajar por sueldos mediocres, nuestro protagonista, es un fracasado que no ha logrado mantener un trabajo en toda su vida, siendo sincero nunca ha podido ma...