prologo

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Todas las cosas tienen un límite y Amy había encontrado el de su relación con Jake.

Tal vez la señales eran demasiado confusas oh solo es que ella estaba muy ciega en verdad ¿Alguna vez quiso una relación con Jake? Es decir, si tenían una buena química en lo laboral y lo cotidiano, estaban en buena sintonía a la hora de la acción y Jake sabía cómo explotar su lado más infantil ¿Esas eran buenas razones para iniciar una relación?

Ahora que lo pensaba ¿Por qué se había enamorado de Jake? No, no lo había estado nunca, una declaración accidentada después de meses de tratar de arruinar su relación y justo antes de la que hubiera podido ser la misión más peligrosa a la que se hubiera enfrentado el detective ¿Por eso se enamoró de el? ¿Tenía miedo de que muriera?

Ella quería tantas cosas en su carrera profesional, había visto la admirable historia de la teniendo Olivia Benson, escaló de patrullera a detective y de detective hasta ser un ícono feminista. Ella quería eso y tal vez una relación con Jake no sería el motor para alcanzar su sueño.

¡Maldición! Hasta la relación de Pimiento y Rosa tuvo más sentido y coherencia, ahora lo entendía.
El nine-nine no sería el lugar para alcanzar todo su potencial, lo sabía, si seguía atorada en un lugar donde había vivido tantas cosas, no podía seguir viviendo en el mismo planeta de Jake.

Por eso ese día, cuando por fin las cosas estuvieron en verdadera perspectiva junto las cosas de Jake y le pidió que se fuera de su vida.

Tenía demasiados sueños y no los podría cumplir si tenía que cuidar y preocuparse por Jake. Si Amy quería en verdad poder superarse debía ponerse un reto mayor, por eso cuando un puesto de detective en delitos sexuales se abrió en Manhattan ella fue la primera en solicitarlo.
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Sonny ya estaba en la lona, no podía más sentía que se estaba derrumbando a pedazos cual castillo se arena que es golpeado una y otra vez por las olas.

Cada vez que cerraba los ojos podía recordar tantas cosas tan horribles, podría recordar el vacío del cañón que le apuntó a la frente, la fría sensación metálica contra su piel; podría sentir la mano de aquel criminal que se había resbalado de sus dedos y su cadáver en el piso. Había pastillas de todos colores en su buró que no servían más que para darle dolor de estómago por lo fuertes que eran; Para dormir, para mantenerse despierto en el trabajo, antidepresivos, ansiolíticos, para un horrible tic nervioso que había desarrollado a causa del estres, solo para tomar el café debía tomarse dos Aspirinas para poder resistir el día.

Pero ya no servían de nada, ya nada servía. Con cada día que pasaba en la UVE sentía que moría un poco más, las pesadillas lo estaban persiguiendo y lo alcanzaban, ya no podía confiar en nada, ya la vida no servía de nada ¿Cómo podría confiar en alguien y no pensar que podría ser un violador en potencia?

Simplemente ya no podía resistirlo más, tal vez lo que lo convenció de que lo mejor era irse, fue que su amado Rafael, el hombre al que más amaba se fue como se van los sueños al despertar. Se fue aún sabiendo que Sonny lo amaba, como si dijera "no me importan tus estúpidos sentimientos".

Sin Rafael ya no tenía fuerzas para afrontar el día a día. No tenía verdaderos motivos para quedarse ¿Por qué lo haría? Si siempre era el pelele que pagaba los platos rotos, era el pelmazo al que siempre le terminan gritando por salirse del carril, era el eslabón débil.
Si no era Olivia por algún detalle, era Amanda por cosas que incluso ella podría resolver pero era mejor gritarle a Sonny y tratarlo como perro y ya tenía los bolsillos llenos de piedritas de la actitud condescendiente de Fin. Tal vez ya no podría contar a Nick que constantemente lo golpeaba oh se burlaba de sus detalles oh su personalidad amigable.

Ahora que estaba en perspectiva ¿Por qué había soportado tantos abusos?

No tenía por qué seguir muriendo donde no era feliz.

Por eso mismo busco un lugar lejos de Manhattan, no se iba a quedar donde solo quedaban recuerdos horribles y un corazón roto.

Y glorioso fue cuando en el precinto 9-9 de Brooklyn apareció un lugar para ser transferido.

《𝙴𝚕 𝚕𝚞𝚐𝚊𝚛 𝚊𝚕 𝚚𝚞𝚎 𝚙𝚎𝚛𝚝𝚎𝚗𝚎𝚌𝚎𝚜》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora