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| NARRADOR |
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en uno de los tantos días de trabajo de las dos chicas

Entran tres hombres que Makio reconoció de inmediato, y viceversa...

Sanzu, quien entro como si nada y llegó hasta la caja principal, Makio seguía en shock

– A-a sus órdenes....– Decía Makio

– Que venden? – Dijo sanzu

– Vendemos ropa fíjese :) – Dijo Makio incrédula – ¡Pos café imbécil!...y .... y donas!! –

– Hay pero tampoco se enoje señora!! – Se quejo el peli-rosa – Y quiero un café aguado –

– Ah?? Que clase de café es ese?! – Pregunto Makio

– Hay aver quitate, drogadicto de mierda – Lo quitó Ran – Sisi eh, danos tres cafés americanos, fríos, porfavor...–

– Okey... – Makio arrancó una hojita y la dejo en una mesita –

– Si gustan tomen asiento en lo que estan sus cafés –

– Okey, gracias makio-chan – se fueron a sentar a una mesa algo cerca de donde ella se encontraba

segundos después llegó Aciel y empezó en interrogatorio...

– ¿Los conoces?... –

– Si, son conocidos de alguien que considero mi hermano mayor – decía mientras veía su celular

– ¿Cuántos años tienen..? –

– entre 28-30 años aproximadamente...–

– Te cojerias a uno? –

– Talvez a...¡¡Oye!! – La volteo a ver de forma molesta –

– hay... solo decía, además, dijiste 'Talvez' ...

– ¡Salen tres americanos fríos!! – dijo un joven de cabello negro y ojos cafés

– Irá, en vez de que andes preguntando pendejadas, llevaselos!! – dijo mientras le daba una bandeja con los cafés

– Ash, hay voy – Se quejo

| MAKIO |

Me lleve la sorpresa de que un par de imbéciles y un drogadicto sabían donde trabajaba, diré que solo es coincidencia y no nada turbio...

Después de que Aciel fuera y les dieran el café que ordenaron, a los diez minutos sanzu regreso a la caja, pero ya venía más normal y no como antes...

– Me das tres donas – Dijo mientras veía la cosa esa donde estaban –

– De que las vas a querer? – pregunté

– una de, azúcar.... otra de, azúcar.... y otra de -  – lo interrumpí

– De azúcar? – lo mire

– No!! de Chocolate –

– Aaa – agarré las donas y se las entregué –

– gracias...– El desgraciado lo digo como si tuviera la obligación de decirme gracias –

– Aja...–

Después de cinco minutos, masomenos, miraba de reojo a esos tres, lo curioso es que hacían llamadas constantemente, osea, pasaban como menos de cinco minutos y hacían otra llamada...

 𝐓𝐇𝐀𝐓 𝐅𝐄𝐀𝐑 𝐈𝐒 𝐌𝐈𝐍𝐄 || 𝓜𝓲𝓴𝓮𝔂 𝔁 𝓑𝓸𝓷𝓽𝓮𝓷 𝔁 𝓞𝓬Donde viven las historias. Descúbrelo ahora