Capitulo 6 "Mamá"

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2 meses después

Creo que una de las cosas más satisfactorias que hay en la vida, es que llegue alguien sin avisar. Alguien que te enseñe a ver el mundo de otra manera y te enseñe a volar con tus propias alas.

Han pasado dos meses desde que aquella escena se repetía en mi mente, aún sentía la adrenalina y miedo corriendo por mi cuerpo, el frío aire chocando con mis mejillas y mi corazón romperse una y otra vez aunque no debería.

Pero aunque Ian posiblemente haya salido de mi vida sin siquiera correrlo, llego Sebastián. Protector, rudo y con la mirada vacía.

— Deberías dejar de estar en los arboles por algunos minutos y prestarme atención — lo miré y sonreí intentado parecer inocente.

— Prefiero ver Supernatural — y él asintió una y otra vez con una sonrisa burlesca en el rostro. 

Sebastián siempre encontraba las películas y series en las que salían ángeles un verdadero asco, siempre tenía una mala excusa para ver otra cosa pero yo nunca dejé que cambiara mi elección. 

— ¿Quieres ser una buena persona e irte directamente al cielo al hacer esta hermosa acción? — Sebastián me miro raro — ¿Puedes ser tan amable de pasarme mis amadas gomitas?

Él rodó sus ojos y me pasó cuatro paquetes de unas gomitas con sabor a frambuesa.

Gracias, pensé.

— De nada — dijo él y sonrió aún más.

Al pasar de los minutos, el cansancio comenzó a mecer de un lado a otro mi cuerpo en un intento de hacer dormir este y lo logró, pero me dormí con la duda de porqué Sebastián habia respondido a mi agradecimiento cuando mis labios estuvieron juntos y no dijeron palabra alguna.

Sebastián

Sentí como su respiración se volvió pesada de un momento a otro y la acurruque en mis brazos, desde hace tiempo no la veía tan tranquila, fuera de problemas y preocupaciones. Volvía a ser esa pequeña que creaba cosas con su mente y la naturaleza que la rodeaba.

Pero la tranquilidad no le duró mucho, sentí como comenzó a tiritar y emitir pequeños balbuceos, seguidos de pequeñas lágrimas que recorrian sus mejillas.

Verla llorar, aunque sea durmiendo me partía el corazón una y otra vez.
Tome su cuerpo, la llevé y dejé suavemente en su cama. Dirigí mi mano a su frente y borré el recuerdo de mi equivocación.

— Alex.. — susurré,  más no se movió ni despertó.

Alexandra

“— Dios mio, mamá, estás aquí — envolví mis brazos alrededor de ella y dejé que su calor me envolviera como cuando era pequeña. Lágrimas caían suavemente por mis mejillas.

— Pequeña, tranquila... — susurraba en mi oído con su cálida voz. Me separó de ella y me miró directamente a los ojos. — Necesito que me hagas un favor,  mi niña, dime que podrás hacerlo — asentí.

— Lo que sea, mamá.

— Necesito que Lisa y tu huyan, que no les importe nada, cariño. Deja todo y volverás conmigo una vez lo hagas.

— No mamá ¿Por qué?¿Y Shane?

Ella me miró fríamente y repitió “huye”. Su cuerpo comenzó a desaparecer mediante pasaban los segundo. Su mirada seguía puesta en mi cuando desapareció por completo y volví a la realidad. Desperté con un feroz grito que salió de mi garganta.”

¡Mamá!

Lo último que vi antes de desmayarme, fue la preocupada mirada del chico a mi lado.

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⏰ Última actualización: Mar 08, 2018 ⏰

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