Lee Min-si llega como nueva al instituto Hyosan siendo hermana de Lee Su-Hyeok.
Pero no sabía que su primer día de clases se volvería en un caos
Tampoco se percataria que se enamorara en medio de esa situación tan infernal.
Su presid...
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El aire viajaba entre mi pelo mientras miraba el campus de la escuela lleno de zombies, aún no podía procesar está situación.
Hace unas horas estaba en la cafetería con mi hermano, y ahora estamos en una sala encerrados, pero huyendo de los zombies.
Nunca creí que pasaría esto, la raza humana se destruía a ella misma, unos a otros como si estuviéramos en una guerra.
Muertos vs Vivos ?.
Nadie sabe, al pareces esas cosas llamadas "zombies", estaban muertas, pero su cerebro aún tenía reacción y trabajaba, pero no de una forma normal.
Si, no, más salvaje, rápida, y te siega por completo, como leones cuando ven a su presa, corren, se preparan, atacan y comen.
Lo mismo pasaba con nosotros, ellos el depredador y nosotros la presa.
Sinti un brazo alrededor de mis hombros, no necesitaba voltear para saber quién era pero por instinto lo ise.
Nunca fui cercana a el, y ahora me arrepiento, tantas veces que me invitó al parque y lo rechace, las veces que me invitaba con sus amigos y también lo rechazaba, como desearía en estos momentos retroceder el tiempo.
Siempre pensaba que las cosas pasaban por algo, pero en estos momentos desearía que esto no estuviese pasando.
Sin pensarlo me tiene sobre su pecho, abrazándolo, el quedó estático por unos momentos pero después me envolvió en sus lagos y flacos brazos para dejar un beso en mi frente.
—Su-hyeok... Estaremos bien ?, Verdad –pregunte murmurando y empezando a sentir un nudo en mi garganta y mis ojos húmedos–.
—Lo estaremos, Min-si, no te preocupes –esa fue la gota que derramó el vaso, unas lágrimas gruesas empezaron a salir por mis ojos, enterré mi cara en su pecho comenzando a llorar en silencio y de ves en cuando soltaba pequeños sollozos–.
Nunca me había mostrado así ante mi hermano, pero en estos momentos era lo menos que me importaba, ahora no ay que preocuparse de quién es más débil o quién es más fuerte, todos somos débiles en este momento.
—Min-si... Tranquila –su voz sonó entrecortada, mientras acariciaba mi cabeza–.
No quería que el también se convirtiera en esas cosas, no quería que el me dejara sola, yo tampoco lo dejaría solo a el.
Me separé de él y al levantar mi cabeza vi sus ojos rojos, pero no le importo y me mostró una sonrisa tranquilizadora, yo sin rechistar se la devolví y también deje un beso en su mejilla.
—Te quiero... –murmure esto y me fue nuevamente a sentar a un lado de Nam-ra–.
Voltee a ver a mi hermano y estaba ay, frente ala ventada sonriendo, nunca le demostraba afectó y me arrepiento de eso.
Joder... Me arrepiento de tantas cosas en este momento.
Sentí una mano encima de la mía, voltee a ver a la persona de que había echo dicha acción, encontrándome con Nam-ra.
—El primer día de clases no es el mejor verdad ? –dijo mirándome con una pequeña sonrisa mientras murmuraba–.
–negué con la cabeza mientras también le dedicaba una media sonrisa—No te preocupes, estaremos bien, solo ya que esperar a ver qué es lo que pasa... –solo desvíe mi mirada a nuestras manos, ella iba a quitar la suya de encima de la mira pero entes de que lo hiciera tome su mano y enrede mis dedos en los de ella–.
No los conocíamos, eso era obvio pero las dos sabemos que ay algo que nos hace querer estar una con la otra, o al menos eso era lo que yo pensaba.
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