Portada creada por Vell.
El infierno no es nada comparado con la vida. Las humillaciones, las burlas y el desprecio de la gente es la única cosa que conosco. Todos me llaman monstruo, engendro, bestia, animal pero más allá de eso soy igual a ellos...
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"Hubo una vez una historia que me hizo soñar por vez primera, la escuche de sus labios mientras en mi imaginación el rostro del príncipe feliz era el suyo"
⭐⭐⭐
Estaban cenando y Saint se encontraba complacido al ver como su mascota tenia más destreza que ayer, según le había informado su mayordomo mientras él dormia Perth estuvo prácticando como caminar en dos piernas, además también le pidió a Stefan que le enseñara como usar los cubiertos.
Todavía se caía un poco de comida de su cuchara y a la hora de cortar la carne parecia que tenia una lucha a muerte con el plato pero sus avances se notaban mucho.
A la hora de dormir se acosto en la cama pero al igual que cada noche le era imposible conciliar el sueño.
No podia cerrar los ojos sin pensar en como habían muerto sus padres.
A pesar de haber pasado los años todos aún hablaban del terrible incendio que acabo con la vida de la pareja más distinguida del pueblo.
"Si ellos supieran lo que en verdad paso"
Murmuró una voz en su interior.
"Yo debi decir la verdad ese día pero no pude, ahora solo me queda vivir con mi odio y destruir a la persona que me lo quito todo"
El crujido de la puerta abriendose hizo que se olvidara de todo lo que estaba pensando.
- ¿Qué sucede tuviste otra pesadilla?
- No podia dormir y me preguntaba si pasaba lo mismo contigo - su voz era tan tranquila que escucharlo le brindaba un poco de paz. ¿Podrias decirme como acaba la historia del príncipe feliz?
- Bien sube a la cama y te contaré que pasa - él miro el lugar que su amo señalaba y dudo en hacer lo que le decia. ¿Acaso vas a desobedecerme?
- No, es solo que yo no quiero incomodarte.
- Yo soy el amo aqui, si te digo que vengas tú vienes y ya, no me cuestiones de nuevo o tendre que arrojarte a la calle esta misma noche, seguro que en cuestión de segundos la gente del pueblo intentara matarte. Se que eres muy rápido y más listo que cualquier otra persona del pueblo pero si empiezan una cacería no durarás ni medio día vivo - el rostro de Saint se veia tan lleno de maldad que su cuerpo se lleno de escalofríos y aunque el miedo lo paralizo se arrastro como pudo hacia la cama.
Él lo miró con ojos llenos de rencor.
- No te hagas la víctima es culpa tuya siempre logras ponerme de mal humor - Perth agacho la cabeza.
