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La  mujer  lo  llamaba con  más y  más  insistencia.  A lo  lejos, se  escuchaba como  unos zapatos  de tacón  resonaban  contra el  suelo,  indicando,  muy  probablemente, que  se  estaba  acercando  a donde  él  estaba.  Llevó  sus  manos  a  su  cabello, jalando  de  sus hebras  castañas  con  frustración.

¿Quién  era?  ¿Por  qué  lo  llamaba?  ¿Cómo  lo  conocía?  Y  mucho  más importante.  ¿Dónde  estaba? ¿Qué  hacía  ahí?  ¿Qué  hacía en  un  lugar con  una apariencia tan...  retro?

Miró  a  su alrededor, buscando  un  lugar para esconderse  en aquella  habitación  que  no  le pertenecía.  Estaba  algo  asustado.  Más que  algo,  bastante. Despertó  luego  de  un  sueño  extraño  de luces  y  estaba en  un  lugar  que  no  era de  su pertenencia y  que  ni  mucho  menos  conocía.  Sus  ojos se  clavaron  en  la  madera de  la puerta  del armario,  mientras que  el sonido  de  los  tacones de aquella mujer se  escuchaba cada vez  más cerca. Caminó  hasta  al  mueble,  y  un  golpe  se  escuchó  en la puerta. Cerró  los  ojos  con  fuerza, y  abrió  el armario  decidido  a  esconderse  ahí  dentro.

"¡Cariño!  Oh-  Estás  despierto."  Dijo  la fémina,  una vez  abrió  la puerta  de  la  habitación. Él apretó  el agarre  que  tenía sobre  la  madera del armario,  maldiciendo  en su interior al  ser  descubierto. "Apresúrate  y  alístate,  tienes que bajar a  desayunar e  ir  a  la escuela, Taehyung." Seguido  de  eso, escuchó  la puerta  cerrarse  y  al inclinar un  poco  la cabeza para ver en aquella dirección,  ella ya no  estaba.

¿Taehyung?  ¿Escuela?  

¿Cómo  es que  sabía  su nombre  y  que  era  eso de  que  otra  mujer  que  no  era  su  madre  ni su hermana lo  mandaba a  la  escuela?

Suspiró  y  se  pasó  las  manos por  el rostro. Quizá,  ese  sueño  raro  que  tuvo  fue  porque  le habrán inyectado  alguna droga, y  el estar  ahí significaba que  lo  habían  secuestrado. Quizás una familia que  había perdido  un  hijo  que  o  casualidad  tenía  su  mismo  nombre  lo  secuestró  para  llenar  ese vacío. Y,  quizás,  al bajar a  desayunar algún  viejo  con  un  arma lo  amenace  para  que  no  se  escape. Sí, esa  era  la  opción  más lógica para Taehyung  en  su  cabeza.

Devolvió  la  vista al  armario  y  frunció  los labios al  ver  lo  único  que  tenía para usar.  Y  optó  de intentar combinar lo  mejor  posible  esas  prendas, intentando  ignorar  que  muy  probablemente parezca un  ancianito  con  eso.  Para su  mala  suerte,  aquella habitación  no  tenía baño, por ende tenía que  salir  de  ahí para  encontrarlo  y  poder  asearse  como  es  debido.  

Abrió  la puerta del cuarto  y  asomó  la cabeza,  viendo  de  un  lado  a otro por el pasillo para comprobar que  no  había nadie. Y al  ver  que  era  así, salió  con  total  sigilo  en busca  del cuarto  de baño,  moviéndose  despacito  y  con  cuidado,  intentando no hacer ruido  para  que  sus  posibles secuestradores no  quieran  hacer  nada en  contra suya.  

Caminando  de  puntitas,  como  si  hacer  ruido  fuese  el  peor pecado,  se  movió  por  el pasillo. Divisando, a  unos cuantos  metros,  la puerta  abierta  de  lo  que  parecía ser  el baño. Sonrió  para  sí mismo  y  aun  intentando  no  emitir  sonido  alguno  se  movió  hasta  ahí.

Las bisagras de  la puerta  de  la habitación  contigua a  su  destino  chillaron, haciendo  que  se mantenga  estático  en  su  lugar y  sin poder  moverse.  Reteniendo  el  aire  al  pensar  que  había pisado mal  y  por  consecuente, había despertado  al hombre  malo  de  la  pistola. Un  bostezo  se  escuchó  y luego  sintió  una  mano  apoyarse  en su hombro, dándole pequeñas palmaditas  en  un  gentil  saludo.

I promise ↺Kooktae↻ Donde viven las historias. Descúbrelo ahora