𝓓𝓮𝓪𝓭 𝓜𝓮𝓶𝓸𝓻𝓲𝓮𝓼━━━━━━━━ soukoku

-02-

Yuan le había dado una noticia excelente, Kashimura Chuuya había despertado al fin. Luego de un año abrio los ojos, pero Nakahara Chuuya nunca volvería a hacerlo.

Miro el anillo entre sus dedos con el que pensaba comprometerse a casarse, no se atrevió a deshacerse de él, tal vez de algún modo esperaba que su amado Chuuya algún día abriera esa puerta y él se daría cuenta que todo había sido una pesadilla, tal vez se quejaría del mal servicio de la cafetería, él abriría una botella de vino, le diría que se relaje, y mientras Yuan ajustaría la iluminación y la música desde las sombras él se prepararía para arrodillarse y pedir su mano.

Así era como lo tenía planeado para ese quinto aniversario.

Pero recibieron la llamada de que Chuuya había sufrido un accidente automovilístico.

Dazai Osamu nunca había creído en las coincidencias, no, al menos hasta que su novio se accidentó contra su propio hermano gemelo, muriendo en el lugar del accidente, y siendo la única opción para un transplante múltiple a su hermano gemelo que por poco padecía su mismo destino.

Entonces, él y Yuan comenzaron a creer en el destino y su veracidad.

“Una parte de nuestro Chuu está viviendo en él, no?” fue la pregunta que le hizo Yuan, y que él no supo cómo responder. Sabía que Chuuya y Yuan se querían como hermanos, y no quería que la peli-rosa se hiciera ilusiones equivocas acerca de lo que sucedería más adelante, no quería que ella pensara que su relación con el hermano de Chuuya sería como la que tenía con Nakahara, no quería ver qué se desilusionara.

Luego de perder a Chuuya, Yuan era lo único que le quedaba, era su único soporte y no deseaba ver cómo la esperanza de sus ojos grises de extinguia.

Escuchaba llorar a Yuan desde el otro lado de la línea, y quería abrazarla, quería confortarla como ella llevaba haciendo con él desde la muerte de su novio.

—Yuan, ven a casa, necesitas descansar.

Del otro lado de la línea solo hubo silencio.

—Dazai... ¿Tu crees que si muero ahora vaya al infierno?

Dazai no entendió la pregunta, tragó saliva en su confusion, sin saber que responder a Yuan.

—¿Por qué preguntas eso, Yuan?

—Porque... Ahora mismo estoy deseando tanto que hubiera sido el hermano de Chuuya quien muriera, y no nuestro Chuuya...

—... Solo ven a casa Yuan, yo cubriré tu turno en el hospital.

Cuando Yuan llegó pudo observar las ojeras profundas en sus ojos, no había abandonado el hospital en algunos días, cuidaba de ese chico como hubiese cuidado de su mejor amigo, aquella visión lo lastimó, Yuan no estaba haciendo todo eso por el Chuuya que conocía, pero la conocía lo suficiente como para saber que quería hacer eso con la esperanza de recuperar en él un poco la cordura.

—Ve a dormir, por favor, yo iré al hospital.

Yuan asintió como única respuesta, tenía los ojos hinchados y la mirada perdida, cuando Yuan al fin se fue a su habitación él salió de la casa para dirigirse al hospital, no podía creer que haría eso.

Ir al hospital a cuidar al hermano de su novio no era la mejor idea que había tenido, pero no tenía otra opción. Estaba haciendo eso por su amiga, nada más.

Cuando entro en la habitación del chico su estómago se revolvió, era como ver a su amado frente a él, quería lanzarse a abrazarlo, a besarlo, quería decirle que el tiempo sin él fue un completo martirio.

—Hola, soy amigo de Yuan, la chica que estaba contigo hace unas horas. Vengo a cuidarte ya que ella se fue a dormir.

—Gracias... ¿Cuál es tu nombre? ¿Éramos amigos antes?

—No, no éramos amigos. Y soy Dazai, por si necesitas cualquier cosa puedes decírmelo.

—Gracias Dazai, por decírmelo.

La sonrisa de Chuuya le iluminó como el primer rayo del sol de primavera luego de un largo invierno, así que está vez no lo evitó, y termino sucumbiendo ante el llanto que llevaba reteniendo desde hacía tanto tiempo.