un motivo para vivir

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Recuerdan que les dije que no valía la pena vivir la vida...pues me arrepiento a lo grande, en un abrir y cerrar de ojos mis pensamientos cambiaron en un instante y toda gracias a la omega que estaba encima de mi...luna. Ella estaba  recostada encima mío con su cabeza debajo de mi cuello y sus pequeñas manos estaban en mi pecho jugando con mi top deportivo negro jalandolo y soltandolo. Las dos esperábamos a que el nudo pasará contando los segundos sin dirigirnos la palabra.

Derrepente su jugeteo paró, mire un poco hacia abajo pero con cuidado para no lastimarla, se quedó dormida. Dios era tan adorable que me moría de ternura, esa omega sacaba mi mejor lado y me gustaba. Acariciaba su espalda con mis manos y luego imite su estado y decidí dormir junto con ella.

2 horas después.

Me desperté de un increíble sueño, me estire un poco y bostece, hace años no dormía así pero faltaba algo mira abajo y para mi sorpresa no estaba luna. Me cente lo mas rápido que pude gire mi cabeza a todos lados no pude verla es más nobpodia ver nada estaba completamente a oscuras, recordé que tenía mi teléfono en el bolsillo de mi pantalón. Busque en mis pantalones que seguían a medio muslo junto con mi boxer y encontré mi teléfono, utilice la linterna y busque señales de luna pero no estaba, eso me hizo generar un millón de preguntas(¿donde está?) (¿estará bien?) (¿acaso los efectos pasaron y se asustó de verme debajo de ella?) Tantas preguntas que la última parecía la más lógica, claro por que no habría de asustarse de mi. Me levanté mi miembro estaba flacido y un poco húmedo, me subí el boxer y mi pantalón me lo abroche y me puse mi camisa y decidí amarrame mi suéter en las caderas pues aún tenía las manchas de mi semen. La puerta estaba abierta sin llave la habri y sólo pide ver como el pasillo estaba siendo iluminado por la luz de la luna, mire mi reloj marcaba las 7:12 de la noche cerré la puerta y me dirigí a mi departamento del campus.

Mientras caminaba por el sendero podía oler muchas feromonas viniendo de los complejos de apartamentos que estaban por esa zona. Seguro eran todos los que pasan su temporada con su pareja pues los olores de las feromonas estaban combinadas. Aún me sentía mal por no despertar junto luna pero para que molestarme, todo y cada vosoa que dijo o hizo fue por los efectos de la temporada de apareamiento, si no era yo le los hubiera dicho a cualquier alfa. Tenía la cabeza baja hace unos segundos quería volver a vivir la vida pero ahora me veía como una idiota, me lo digobcada día (luna jamás se fijará en ti idiota) era la triste realidad pero ya estaba acostumbrada a ilusionarse para que luego la vida venga y me aplaste.

Cuando llegue a mi edificio subí las escaleras a mi cuarto, entre prendí la luz y mire mi espacio, decepcionante, mi cama al lado de la puerta al frente mi escritorio y a la izquierda de este una mini cocina y un mini refri, y al lado la puerta del baño, al lado de mi cama estaba un pequeño armario donde guardaba mi ropa y luego una pequeña tele vieja. Todo el piso estaba sucio, tenía enlaces de sopas instantáneas vacías en el suelo papeles, envoltorios de dulces, periódico etc.

Me reviste en mi cama no sin antes desactivar mis alarmas, hoy era viernes ósea que mañana no tendría clases pero si trabajo ero no empezaba hasta las 2 de la tarde. No tenía ganas de pensar en Todo lo que pasó, aún que una parte de mi se emocionaba la otra sólo quería olvidar aquel recuerdo doloroso pero a la vez....muy excitante....No, no pienses en eso me reclame, me paré de la cama y fui al baño a lavarme la cara para refrescarme el departamento era pequeño por lo que mi altura me perjudicaba, tenía que encargarme para caminar en el, eso era malo para mi espalda. Entre al baño que era más pequeño, al entrar estaba el inodoro y a la derecha el lavamanos y luego de este una pequeña regadera. Me lave la cara salí del baño hacia mi armario me quiero el pantalón lo dejé en el suelo, busque que ponerme pero toda mi ropa estaba en una pila en una esquina de la cama, se me olvidobllevarla a la lavandería, me frustre, ya que, me dije a mi misma me decidí quedar en mi camisa sin mangas blanca y mi boxer y deje lo demás en el suelo.

Temporada de apareamiento Donde viven las historias. Descúbrelo ahora