Capitulo 1

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Yo era menor de edad, no podía salir del país. Mis padres trabajan como empresarios fuera del país y los veo muy pocas veces en el año.

—Samay estemos unidas las cuatro, te prometo que estaremos bien, en casa de mis padres nos podemos quedar, pero ellos estan hasta Nueva Aquitana y en carro nos tomaríamos dos días sin descanso en llegar. —Exclamó la mamá de Enith.

—Podemos tomar un vuelo para Aquitana, llegaríamos en una hora y media a dos horas como máximo, tengo un poco de dinero ahorrado asi que no se preocupe por pagar mi boleto de avión.

—Ese no es el problema Samay, el problema es el tráfico que hay en estos momentos, nos tomara horas para llegar a la terminal. Incluso no tengo auto para llevarlas, y las estaré exponiendo demasiado si dejo que nos vayamos caminando.

—Señora si el tráfico es el problema... Yo tengo una moto que mis padres me dieron como regalo de 17 años, no tengo licencia pero se conducirla muy bien. La moto está en casa de mis abuelos, como uno 15 minutos de aquí.
Vamos caminando y las llevo al aeropuerto. Puedo regresar por usted al último, no cabemos las cuatro en mi moto, es 125 de cilindraje.

—Lo mejor que ustedes vayan solas, ya están grandes y saben cuidarse solas. Yo estaré bien, no se preocupen, estaré con mi esposo y las alcanzamos en casa de mis papás.

—Pero mamá ¿Cómo sabré que estarás bien? No tengo datos en mi celular y tampoco quiero alejarme de ti. —Dijo Enith entre sollozos.

—Se que es difícil mi amor, pero aún así debemos hacer un pequeño sacrificio, no estarás sola te acompañan tu hermana y tú mejor amiga. Confía en mí que todo saldrá bien y estaremos bien.

—Yesyka... Hija, porfavor dejen a un lado su orgullo y sean un poco cercanas, la situación no es muy buena como para que se odien. Las tres deben apoyarse y estar juntas ¿Esta bien?, ¿Prometes hacerlo?.

—Si mamá, está bien lo prometo.

Las hermanas se dieron un abrazo muy nostalgico con su madre y su padre.
Ya teníamos empacadas nuestras cosas, comida enlatada, agua, identificaciónes, dinero, ropa, etc.

—Bien, ahora vayan a casa de los abuelos, las espero ahí chicas, cuídense mucho. No olviden que las amo. —Lanza un beso al aire.

Tomamos el transporte y nos dirigimos a casa de mi familiar, a medio camino el autobús ya no avanzaba  a causa del tráfico infiernal que había, las personas deseaban salir del país lo antes posible y proteger su propia vida.
Decidimos bajar del autobús e ir caminando, sería más fácil llegar a pie.

De un momento repentino se nos acercarón dos muchachos con una mototaxi y se ofrecieron en llevarnos a casa de mis abuelos con la condición de darles un poco comida y ropa, porque las tiendas y supermercados estaban en completo abandono de productos
Al llegar a nuestro destino dimos las gracias y salimos.

Al llegar a casa de mis abuelos, la casa estaba completamente vacía, solo quedaba mi moto en un rincón del patio.
A lo mejor mis abuelos pensarón que yo vendría por mi moto pero nunca me llamarón, nunca me preguntarón ¿Cómo estas?, ¿Nos vemos en "x" lugar?. 
Quizá porque se fuerón antes para evitar el tráfico que hay en este justo momento y no les dio tiempo de tan siquiera avisarme.

O eso creí...


    06/03/2022

Nunca debí quererte Donde viven las historias. Descúbrelo ahora