Todo lo que nunca llegue a decirte

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"Que sí.
Que estoy mal,
pero voy a estar bien.
Eso me lo prometo"
    César Ortiz

Te estas tomando muy en serio esto de los correos, tranquilo, no soy una acosadora, oh bueno, si, pero soy de las pacíficas. Aun así no deberías asustarte cuando estas del otro lado del mundo... Me acuerdo de cuando me lo dijiste, me sentí jodida, sabes, como cuando un sueño se rompe y tienes la idea clara de que no va a poder ser

" - Foto -
Axel: ¿como me ves con el pelo de este color?

Noah : ¿te vas a teñir ahora?

- escribiendo...

Axel:Lo voy a hacer cuando me vaya

Noah:¿Irte?

Axel: Me mudo a Estados Unidos Noah"

Al principio dolió, y fue complicado asimilar que probablemente no te volvería a ver, entonces tuve la idea más estúpida del mundo y te escribí una carta, donde te conté todo lo que sentía, todo lo que desde que llegué nueva a la ciudad oculte.
Pero... ¿qué sentido tenía? no cambiaría nada, tenías tu familia allá, y que sentido tenía que te quedarás cuando todo lo que te importaba estaba allá.

"-¿cua... cuando te vas? - dije en un susurro bajando la mirada para que no notara como mis ojos empezaron a cristalizarse

-Me voy a inicios de año Noah"

Tenía 6 meses, 6 meses en que lo único que quise hacer era que te dieras cuenta de que eras un chico que valía la pena, al menos para mí, pero que en el fondo estabas tan herido, que no dejabas que nadie te ayudara, quizás por orgullo, o simplemente porque eras un masoquista, siempre lo fuiste

"-Intento hablarle pero nunca me responde, o me corta y me cambia de tema

-Y... ¿por qué no te alejas? - le preguntó al chico frente a mi observando cómo se queda mirando el atardecer

-No puedo alejarme de ella

-Si, si puedes

-Noah no puedo

-¿Nunca has oído eso de que querer es poder? ese es tu problema, no te quieres alejar de ella, y sabes que eres capaz de olvidarla, pero eres tan masoquista que te gusta pensar en que algún día las cosas cambiarían - dije esto último en susurros dándome cuenta de que con esto último había descrito justamente lo que me pasaba con el, no quería dejarlo ir, sabía que sería lo mejor, para el y para mí, pero era lo suficientemente masoquista para simplemente decidir que sin el nada sería igual, yo no sería igual, y todo se desmoronaría ante su ausencia "
     N. Q. G