3

53 9 3
                                    

—Tora—

•🐯•

Tres meses y trece días. 

Han pasado exactamente tres meses y trece días desde la llegada de Yuki; de verdad que ahora empieza a asustarme un poco como es que recuerdo perfectamente esto, digo, no es como que me levantara y contará los días pero si es algo tipo "¿cuanto tiempo? oh, sí, han pasado tantos meses y tantos días".

Por lo tanto, hoy me desperté y simplemente recordé el día, los conté y la cuenta me dio eso, tres meses y trece días.

Ahora me llevo un poco mejor con él, es tranquilo.

Entre otras cosas, Usagi nos inscribió a ambos  en un programas de manualidades que ofreció el reformatorio hace una semana, dicen que esto puede reducir un poco más la condena o algo así; de todas formas, le encargué a la amable anciana del programa un cascabel, ¿por qué? no lo sé, se me salió y es todo.

Lo pensé en voz alta y la señora dijo; "conseguiré uno para ti".

En parte me pareció un poco increíble como son tan amables con nosotros, aunque es difícil decir si es por compromiso o no pero, me hace sentir bien que incluso quieran suministrarnos elementos más "personales" para la decoración de las manualidades, aunque no me alegra, puedo decir "hey, que bien".

A veces esto me hace pensar que todo esto marcha demasiado bien últimamente. 

Fuera de eso no han cambiado mucho los alrededores ni las situaciones, aún estoy intentando volver a regular mis horarios de sueño ya que después de la última carta que obtuve no dormí bien durante días.

Me avergüenza un poco, pero en algunas ocasiones en la noche, cuando no podía dormir Usagi me hablaba de una manera tranquila, hacía eso hasta que yo logrará dejar de pensar en cosas innecesarias y logrará conciliar el sueño, también acariciaba mi cabello de vez en cuando y de verdad no me gusta que hagan eso, como ya mencioné anteriormente.

Pero si es él quien lo hace, supongo que está bien.

Su tacto, su voz... todo se me hace tan extraño cuando él es quién lo hace, porque se siente bien, me puedo sentir en paz cuando está cerca mío. Desde hace años que no lograba sentirme en tranquilidad de esa manera y es extraño que eso pase justo en este lugar... solo con él.

—Kazutora. — Me llamó él, interrumpiendo mi charla interna. — Vámonos, llegaremos tarde al programa de manualidades.

—Déjame aquí, el piso está frío y el calor es horrible.

Ahora que me fijo, el cabello de Usagi creció y las raíces negras se extendían, no mucho pero sí más de lo que estaba antes.

—Vamoooos.

Me tomó del cuello de la camisa, su agarre era muy ligero y él no era muy fuerte, bueno, era fuerte pero supongo que solo lo suficiente como para cargar con una persona igual o más ligera que él... de todas formas no es como que me ahorcará, entonces fácilmente podría dejar que él me llevase por la vida de aquí para allá.

Sería divertido.

Se cansó de que no ponía de mi parte para ir, así que esta vez puso sus manos en mis axilas, ahora en un intento de levantarme, cosa que está vez logró, más porque yo ya me iba a levantar que por su esfuerzo... creo.

Fue un poco extraño lo que sucedió a continuación, porque él, mientras yo me levantaba se desestabilizó un poco y casi cae, aparte como estaba sosteniéndose de mí casi me hace caer junto a él.

a little bunny ! 旦Donde viven las historias. Descúbrelo ahora