Capitulo 10

1.2K 107 36
                                    

Daphne

Me va a dar un paro cardiaco en cualquier momento no se porque reaccione de esa manera con la madre de Francesco pero ella sobre paso mis limites y eso no podía dejar pasar , le pedí disculpas un millón de veces y el simplemente me decía lo mismo 

«Ella se lo merecía no te preocupes »

— Puedes dejar de pensar tanto y dormir un poco — Gruñe con voz ronca Francesco 

Suspiro y cierro los ojos intentando quedarme dormida , apenas llegamos de la casa de sus padres me hecho en la cama a descansar un poco pero llevo casi dos horas intento buscar el sueño pero es imposible cuando pienso demasiado. 

Las palabras de la madre de Francesco llegan inconscientemente 

«Eres muy poca cosa para mi hijo no vales nada compárate con una chica modelo ellas si tiene la capacidad de hacer feliz a mi hijo , en cambio tu no le das nada mírate eres horrenda»

Ser perfecta , no engordar , siempre mentir sobre lo que te pasa , nunca mostrar las emociones a los demás es algo fundamental . Mi madre me enseño a mentir y muy bien ella lo hacia siempre decía que nuestra familia era perfecta y que nunca paliábamos por favor ¿Quién se podía creer toda esa mierda?

Mi madre siempre me critico porque no tenia el cuerpo que ella quería siempre me dio la espalda en las decisiones  que yo quería decidir por mi sola , no puede estudiar algo que yo quería estuve atada a una carrera que odiaba  pero tenia que hacer para complacer a mis padres. Siempre tenia que hacer feliz a otras personas , Pero ¿Yo? ¿Qué hay de mi? yo no cuento yo soy un cero a la izquierda.  

« ¿Acaso no te enseñaron a respetar tus padres?»

«Eres una insolente tus padres no te educaron como se merece pero claro deben ser una poca cosa de gente» 

«¿¡Acaso ya le dijiste que estas.... »

Esa frase no la termino porque Francesco la interrumpió gritándole y luego empezaron hablar otro idioma que desconocía.  

—¿Qué hora es? — Pregunto y el se fija en su reloj de su muñeca derecha 

— Son las doce ¿Por? — Pregunta mirándome a los ojos

—Por nada — Miento quiero salir corriendo me sofoco estar aquí echada en estas cuatro paredes 

—¿Tienes hambre? —Niego de inmediato — ¿Entonces?

— Nada solo preguntaba — Me encojo de hombros 

—Aja claro ¿Y crees que me puedes hacer creer con unas simples palabras? — Gruñe y evito rodar los ojos.  

Se para y se dirige al baño sin antes hablar.

—Cámbiate saldremos —  Me quedo estática ¿Qué? ¿Acaso lee mentes o que mierda? 

Luego de unos minutos sale y agarra su celular y su cartera me levanto siguiéndolo me abre la puerta y me deja pasar.

¿Adonde vamos? — Quiero preguntarle pero me los guardo porque se que no me responderá haci que me evito un mal rato. 

                       (***)

— ¿Enserio? —  Le pregunto y la miro seria el se encoge de hombros fijo mi mirada haci el lugar por decima ves  

—¿Qué? no me mires haci estabas aburrida solo te traje a un lugar que puede que te haga feliz —  Se defiende y era cierto estaba aburrida el peor caso me había olvidado mi libro en casa y por ende no podía leer algo.  

Sei la mia fottuta debolezza, amore©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora