EXTRA

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Corrió por todo el lugar no importaba por donde volteaba el paisaje era igual, en todas partes se podía ver como se quemaba la gente el lava ardiente, como eran torturados por demonios con cuernos, se escuchaban los lamentos de las almas

Tenía que encontrar una forma de escapar de ese lugar pero no podía utilizar sus poderes esas parcas que tenía no se lo permitían y cada vez lo quemaban,

Seguía corriendo cuando de pronto escucho un gruñido muy cerca de el, rápidamente se escondió en una cueva, podía escuchar las fuertes pisaras de la enorme bestia que vigilaba el lugar, escucho como se alejaba, espero un poco

La cueva en donde estaba se derrumbo por el fuerte golpe de la bestia de tres cabezas, corrió desesperado pero fue rápidamente atrapado por una de sus grandes patas

Suéltame asquerosa bestia-grito

Cerbero: pensaste que podrías salir del infierno...humano estúpido esas marcas que tienes te mantienen atado a este lugar...nunca podrás salir de aquí-dijo sonriendo

Me vengaré de esos humanos tu también pagaras-dijo con furia

cebero: eso nunca sucederá...estarás aquí por toda la eternidad- dijo

Con su asico agarro al sujeto

Suéltame asquerosa bestia-dijo pero cuando mas se movía este lo agarraba mas fuerte

Llegaron a un volcán en donde las almas se consumían en fuego y lava ardiente, pudo ver a madara, a zetsu, momoshiki, kinshiki en el fondo del volcán

La vestía lo lanzo al fondo pero lo agarro por la cadena que tenia

Este duchaba por agarrarse de la cadena para no caer

cebero: este será tu cárcel, nunca podrás salir de aquí, serás torturado por toda la eternidad-dijo sonriendo

No, saldré de aquí lo juro-dijo

cebero: eso nunca pasara-dijo soltándolo

Nooooo-grito mientras caía

cebero: nunca dejare que salgas, y si sales nunca podrás salir del infierno, pues esas marcas serán tus cadenas que nunca se quitaran-dijo viendo como se quemaba su piel quedando solo el esqueleto del sujeto

El infierno era por muchos el peor lugar, las almas eran torturados por demonios, que los vigilaban, sus lamentos se oían por el lugar, dicen que las almas eran enviadas a su condena según los pecados que cometían mientras Vivian, pero eso no importaba ya que el sufrimiento era el mismo

La bestia que custodiaba el infierno siempre estaba pendiente de las almas, muchas terminaban en su guarida para comérselas o simplemente torturadas

El nunca dejaría que los enemigos de sus amos se escaparan del infierno aunque era imposible que esto sucediera

Con ese pensamiento se fue a su cueva para dormir un rato y seguir con su vigilancia, pensaba que podría comerse a un alma cuando despertara ese madara se veía muy sabroso para comer, si se lo comería después

Fin   

a hora si adiós!!! 

cerezos y plumasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora