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-"¿Crees que aquí lo vayamos a encontrar?"- pregunto Emma casi en un susurró viendo a cada uno de los niños y niñas, tratando de encontrar al indicado, pero aunque veía a muchos niños y niñas no encontraba al/la indicad@.
-"Lo encontraremos aquí"- dijo Colín tomando la mano de su esposa, sin apartar su otra mano del volante del auto.
Esta en respuesta únicamente le dio un asentimiento, sintiendo como el temor de no encontrar al niño o niña indicada se volviera realidad, esta era la última oportunidad que tenían de encontrarlo/encontrarla.
-"Si"- murmurro Emma, posando su mirada en los niños y niñas que podía ver en el patio, cruzándose de vez en cuando con las miradas de los adolescentes que había, pudiendo notar las tristes y decepcionadas en estos.
Cada uno de ellos sabiendo que eran demasiado grandes para ser adoptados.
Su mirada se separó de ellos en cuanto sintió como el auto se detenía.
-"Ya llegamos"- habló Colín desabrochando su cinturón.-"¿Estás lista?"- pregunto cruzando su mirada con Emma quien asintió, desabrochando su cinturón, para bajar, seguida del hombre, quién con rapidez se acercó a ella, tomando su mano para acercarse a una mujer que acaba de salir del orfanato.
-"¿Señor y Señora D'angelo?"- habló la mujer quien se veía de unos 40 años de edad.
-"Somos nosotros. Soy Emma, el es Colín, mucho gusto"- se presentó Emma extendiendo su mano para saludarla.
-"Un placer, soy Cassandra Relish, soy una de las encargadas de velar por la seguridad y felicidad de los niños en esta institución. La Señora Fernsby los a estado esperando, no pudo recibirlos para terminar de revisar sus datos y que sea más rápido la adopción de su hijo o hija"-
-"¿Puedo preguntarle porque está tan segura de que adoptaremos a un niño o a alguna niña aquí?"- pregunto Colin
-"Este es uno de los orfanatos que tiene más niños, si no encuentra a un pequeño en este lugar les puedo asegurar que no lo encontrarán. Por ahora los llevaré con la Señora Fernsby para que ella los pueda llevar con los bebés"- respondió Cassandra con una gran sonrisa, antes de comenzar a caminar dentro del gran edificio.
-"¿No podemos ir directo a ver la sala de los niños pequeños?"- pregunto Emma con entusiasmo, haciendo que la mujer se detuviera justo en la entrada del Orfanato.
-"No discúlpeme pero no, esos no son nuestros procedimientos. Primero la Señora Fernsby tiene que conocerlos y ver personalmente si son adecuados para cuidar de alguien más. Les pido que me acompañen"- dijo antes de nuevamente comenzar a caminar en dirrección a la oficina de la Señora Fernsby, directora del Orfanato y dueña del mismo.
El silencio reino por casi todo el camino, más ese silencio se rompió tras varios minutos, al escuchar las voces de tres niños y el de una niña, la pareja se detuvo, sin darse cuenta que la mujer había seguido adelanté, creyendo que ambos aún la seguían.
