Estoy embarazada después del divorcio con la superestrella

Capítulo 37

        El corazón de Feng Ting estaba feliz, el de Jiang Li estaba triste.

        El bebé movió sus pequeñas y gruesas piernas y consumió felizmente su comida.

        Jiang Li sólo pedía que la lluvia cayera menos, pero como resultado había una tendencia a hacerse más y más grande, y simplemente no se detenía, y mucho menos se hacía más pequeña.

        Feng Ting sólo rogaba que no dejara de llover, pero no lo hizo, así que se sintió más feliz que si le hubiera tocado la lotería.

        Si le preguntaran a Feng Ting qué quería decir en este momento, tendría que decir: "Gracias, Dios".

        Decidió donar a la buena causa mañana, no, hoy.

        Feng Ting fue supersticioso durante un rato y casi se alegró. Cuando levantó la vista y vio que Jiang Li le miraba con extrañeza, se apresuró a apartar las comisuras de los labios que se habían vuelto hacia el Polo Norte.

        Con eso, dijo de manera pretenciosa: "Bueno, qué hacer, está lloviendo mucho".

        Jiang Li: "......"

        El bebé continuó moviendo sus pequeñas y gruesas piernas para tener un feliz sub-rizo.

        Oooh, ¡el arroz de hoy está muy bueno!

        Jiang Li dijo: "Esperemos y veamos, no debe llover tan fuerte por mucho tiempo, cuando pare, llevaré a Dabao a casa".

        Feng Ting: Dios, por favor, sigue lloviendo y no pares, estoy dispuesto a pagar el doble.

        Jiang Li miró su reloj y dijo: "Por cierto, ¿dónde están el tío y la tía? ¿No van a volver hoy?"

        A Feng Ting también le pareció extraño, su madre había dicho que volvería pronto, pero no sabía por qué no había llegado a casa todavía.

        Marcó el número y no tardó en ser atendido por su madre: "Mamá, ¿dónde estáis?".

        Zhang Yunyi y Feng Beinan se quedaron atrapados en la ciudad, ya que llovía demasiado y no era seguro conducir, así que tuvieron que quedarse en el hotel por el momento. Zhang Yunyi también estaba ansioso por llegar a casa y le dijo a Feng Ting: "Todavía estoy en la ciudad, no te preocupes, tu padre y yo volveremos pronto".

        Feng Ting dijo: "Puede que Jiang Li tenga que quedarse aquí hoy".

        El ánimo de Zhang Yunyi se levantó, ¡esta era una gran oportunidad!

        Era el momento perfecto para desarrollar una relación con un hombre y una mujer en la misma habitación.

        No, no puede volver atrás en esta situación, tiene que sacrificarse para salvar el bien mayor. Tuvo que sacrificarse para salvar su rectitud. Zhang Yunyi tomó una decisión de inmediato: "¿Y qué? Creo que tu padre y yo no volveremos hoy, es demasiado problema ir y venir.

        Antes de que Feng Ting pudiera decir nada, Zhang Yunyi colgó en un instante.

        Feng Beinan se quedó mirando a un lado: "¿De qué estás hablando? Todavía tengo que ir a casa para ver al bebé".

        Zhang Yunyi le devolvió la mirada: "¿No quiero ir a casa? ¡Eres el único que quiere ver al bebé! Estamos creando una oportunidad para Feng Ting, no es como si volvieras a ser una bombilla cuando Jiang Li se queda en casa por la noche".

        Feng Beinan no dijo nada, pero al cabo de un rato murmuró en voz baja: "Tú fuiste el que más gritó cuando se concretó el divorcio".

        "¿Eh?" Zhang Yunyi recibió un pinchazo en un punto doloroso, y ya estaba incómoda, por lo que se irritó: "¿Por qué grité yo más, tú no gritaste, por qué te hiciste el mudo?".