Olas que nos atormentan

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Créditos a los creadores de halo y starwars en sus respectivos personajes y objetos

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Habían pasado algunos días en donde los clones habían descubierto el por que los rumores de la UNSC decían que incluso su infantería tenía un nivel de habilidad bastante alta, durante este tiempo los veinte clones crearon una relación de respeto con sus instructores y también una fuerte amistad fuera del ámbito militar, pero no todo era bueno, había cierto desagrado entre los clones en entrenamiento de vez en cuando intentaban provocar a los ODST, pero estos siempre los ignoraban, o al menos casi siempre.

En estos momento Beta-6 estaba comiendo junto con el autoproclamado batallón Meridian en honor a las historias que el escuadrón les había contado sobre la guerra. Todos estaban teniendo una platica tranquila, sobre como los clones podían mejorar sus estrategias y como adaptarse a las diferentes situaciones, aunque no faltaron los comentarios de otros clones ajenos a su mesa, esto no afectaria a ninguno de los presentes debido a que estos no le daban importancia a sus comentarios, los minutos pasarían hasta que algo inusual sucedería. Mientras nadie se daba cuenta, una niña de no más de nueve años, pelo rubio, grandes ojos cafes, y vestimenta kamioana se acercaría hasta la mesa donde todos estaban hablando, viendo un lugar vacío junto a uno de los soldados del UNSC rápidamente se sentaría despreocupadamente colocando su charola en la mesa mientras volteando a ver su alrededor notando que nadie la había notando aún. Escuchando una conversación del soldado a su izquierda sobre una anécdota de cundo el estaban en la academia, ella dejaría de escuchar progresivamente las voces a su alrededor hasta quedar en un silencio total, y se centraia únicamente en el brazo del soldado viéndolo de arriba a abajo intentando descubrir el material del que estaba hecho, en un impulso de curiosidad tocaría el hombro en un intentó por saciar su intriga, sin darse cuenta que esto haría que el soldado dejaria de hablar con los demás al sentir el toque de sus pequeños dedos en su armadura, haciendo que este girara la cabeza a su derecha, al no ver a nadie pero aun sintiendo el contacto miraría hacia abajo encontrando a una niña con la mirara perdida en su armadura sin prestarle atención a su entorno, antes de que el pudiera decir o hacer algo, ella hablaría.

-¿que material es este?- la niña preguntaria a nadie en particular.

JD la miraría notando que sus ojos no se despegan de su brazo contestando con tono relajado al ver que solo es una niña -una mezcla de cerámica y titanio reforzado- terminaría de decir dándole una leve sonrisa para después relajar sus ojos.

La niña sin esperar una respuesta levantaría la vista para ver los ojos amables de JD a la vez que notaba que todos habían dejado de hablar y la estaban mirando.

-¿es tu hija perdida?- Koot le preguntaría en broma a JD haciendo que varios empezarán a reír.

JD no le prestaria atencion al comentario -ignoralo, es solo un idiota- diría con una sonrisa mientras Koot lo veia con fingido dolor -y dime, ¿Cuál es tu nombre?.

-Soy Omega, es un gusto conocerlo, señor- Omega diría con tono alegre 

-Mi nombre es JD, no hace falta que seas tan formal- JD le diría mientras le frotaba la cabeza, mientras con su otra mano empezaba a señalar a su escuadrón -ellos son Adam, Alfred, y el que tiene cara de idiota en una armadura es Koot- terminaría haciendo que este último gritara indignado.

Mientras ella reía saludaría a todos - Hola Adam, Alfred y Koot, es un placer- al terminar de nombrar a todos, una voz femenina la interrumpiria.

-¿¡Acaso no me piensas presentar!?- Jessica la cual se estaba proyectando en la mesa preguntaría algo enojada por ser dejada a un lado. 

Una perturbacion de otro universoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora