† One shots † Dead by daylight

● Lullaby for a bear ●

❖ El trampero × La cazadora

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La niebla negra adornaba un bonito pero tétrico bosque rojo que estaba siendo decorado por la nieve, una cabaña en medio del bosque estaba siendo iluminada por una vela que estaba por acabarse.

La cabaña estaba adornada con trozos de madera en el suelo, cuerpos de animales sin sus pieles preparados para ser convertidos en comida, juguetes de madera, máscaras y hachas.

Desde adentro podía escucharse un canto tétrico pero que a su vez brindaba calma en una forma extraña.

Anna, era el nombre de una mujer que se crio en estos bosques desde temprana edad. Su madre le enseño todo lo que sabía desde el día en el ella aprendió a caminar.

Después de todos estos años, ella seguia sobreviviendo como podía en este ambiente creado por la entidad. No recuerda como ni cuando llegó aquí, pero se sentía tan familiar que rápidamente se acostumbro a el.

Lo único que no le agradaba mucho era cuando otros asesinos se acercaban mucho a su cabaña. Incluso si mantenían su distancia, Anna sabía cómo lidiar con visitas no deseadas alrededor de su bosque.

Ahora ella estaba terminando de fabricar una nueva máscara, era como la de un gatito, era de madera y la estaba pintando de blanco.

Le gustaba hacer máscaras, le entretenía cuando no estaba en ningún juicio contra los supervivientes o cuando no estaban cazando criaturas en su bosque.

Solo que esta vez algo perturbaria su paz, escucho el grito de una persona. Le pareció extraño, término de pintar la máscara de blanco rápidamente. La cazadora se puso su máscara de conejo y agarro la máscara nueva dejándola a un costado esperando a que seque la pintura.

Tomó su hacha principal, y sus destrales antes de salir de la cabaña y buscar le producto del ruido.

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Por otro lugar, no muy lejos del bosque, había un hombre de altura grande. Estaba colocando en el piso o más bien moviendo trampas para osos de un lugar a otro, lo llamaban el trampero.

Se ganó ese nombre porque se hizo conocido al colocar trampas para los supervivientes durante cada juicio.

Pero la situación ahora era diferente, el escucho un grito cerca también. Fue de inmediato a la zona del factor.

Al parecer era... Nada, juro haber escuchado algo. O quizás haya sido la niebla negra trayendo los gritos de otros juicios que se estaban realizando. En eso sintió como si algo o alguien le estuviera observando.

Giro su cabeza y se topo con una mujer, ella era alta y usaba una máscara de una liebre o un conejo. Observo que cargaba unos destrales en un cinturón y en la mano tenía un hacha grande.

- " Ningún Oso? " - pregunto Anna.

- " Perdón? " -

- " Ningún Oso? " - Volvió a repetir.

No sabía que decía hasta que vio las trampas, claro. Eran trampas para osos.

- " Ah eso, no... Son para los supervivientes pero, eh visto a ese grupo de la... Legión, creo que se hacen llamar así por donde vivo. " -

La cazadora inclino su cabeza, se mostraba interesada. Ella no solía cazar con trampas, normalmente seguiría a su presa y la atacaría en el momento oportuno.

Anna, por curiosidad decidió acercarse a Evan. Pero este la detuvo.

- " Espera! " - Llamó su atención, haciendo la mujer de nacionalidad rusa detuviera su paso.

El trampero fue caminando y retiro las hojas del piso para revelar un trampa activa. Intento sacarla pero término lastimandose en el proceso, soltando un leve quejido de dolor, no era grave ya que solía pisar sus trampas por error durante los juicios.

Anna quería intervenir pero fue detenida otra vez. - " Tranquila, estoy bien.. " -

Pero vez de hacer caso, ella se acercó de todos modos. De las cosas que llevaba encima tomó lo que parecían ser una tela de color blanco, tenía manchas de sangre que estaban viajes. Pero incluso así era decente y estaba limpia.

La cazadora lo uso y con cubrió la zona de la muñeca en la cual se había echo daño. - " Cuidado. "

Hablaba con pocas palabras, y podía ver en sus labios la seriedad constante que permanecía en su rostro, incluso si la máscara de madera cubria la mitad de su cara.

- " Gracias... Eh.. "

- " Anna. "

- " Sí.. Es verdad, no todos los asesinos comparten entre sí. Soy Evan. Evan McMillan "

Entre los dos hubo un silencio breve.

Podría decirse que ambos no necesitaban palabras, la cazadora sabía algo del idioma, pero no todo. Lo básico para mantener una conversación normal.

Pero llegó un punto en el cual se estaba volviendo incómodo. Especialmente para Evan, cuando después vio que la cazadora retrocedió y se sentó en el césped. Incluso le pareció aun más extraño que le invitará a sentarse con ella.

Normalmente los asesinos no interactúan entre sí, aunque la única excepción es Ghostface. Le gustaba ir de visita a cada uno para ver que hacían.

La verdad que no había mucha conversación entre ambos. En primer lugar porque Anna apenas sabía comunicarse, y Evan si sabía hablar, solo que lograba mantener una conversación fija.

En eso, a Anna le pareció bonita idea empezar a cantar una pequeña melodía, la única que sabía. Esto le llamó la atención al Trampero, no quería interrumpirla pero sabía que la había escuchado en otra parte. - " Disculpa pero... Tu eres esa chica que siempre está cantando? " -

La pregunta causó que Anna se detuviera, seguro ella sabía que era la única que cantaba puesto que no había escuchado a otros hacerlo, por lo que simplemente asintió con la cabeza.

- " Ya veo, solo quería decirte que... cantas hermoso. "

Incluso si existía una expresión en su rostro, se sintió bien por un comentario tan simple como ese. - " Madre me enseño. " - Término por contestar

Regreso entonces a seguir con el canto. Incluso si para los supervivientes era terrorífico, para McMillan esto era diferente, era como una especie de comfort.

Quizás... La compañia no era tan mala después de todo, aun tendrían tiempo para estar ahí, quizás no hablar pero con solo la presencia bastaba y era más que suficiente.