XIII | Dulce Aroma

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Fuertes jadeos resonaban através de todo el lugar, junto a las gotas de sudor caer por el suelo, un estruendo feroz sacó a Jimin de sus pensamientos

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Fuertes jadeos resonaban através de todo el lugar, junto a las gotas de sudor caer por el suelo, un estruendo feroz sacó a Jimin de sus pensamientos

— Profesor, necesito un pequeño descanso — jadeo uno de sus alumnos

Jimin sonrió con dulzura, causando que más de uno le de una puntada del miedo

— Son ejercicios sencillos, cualquiera puede ser estos estiramientos — mascuyo el mayor, girando suavemente su cuerpo

— Eso es fácil, para cualquier gimnasta profesional! Pero me estoy por quedar sin descendencia aquí, profesor — levanto su brazo con dolor desde el suelo 

Jimin observo sorprendido al joven alfa, uno podía quedarse atorado luego de intentar hacer tijeras?

— Oh, supongo que force demasiado sus pobres cuerpos — susurro con vergüenza, estaba tan metido en sus pensamientos, que había dado su propia rutina de estiramiento

— Por favor chicos, ayuden a su compañero — permitió, dos jóvenes no dudaron en correr a ayudar a su pobre amigo

Ambos chicos fueron hasta el joven alfa sin importarle a su propio dolor, dejando su rara forma de caminar a la vista

Jimin río suavemente ante la vista, para finalmente chasquear la lengua molesto

Cómo se atrevía su propio alfa en ignorarlo?

La campanilla resonó por toda la institución, sus alumnos no dudaron en salir corriendo, como si su mayor pesadilla se encontrará en el salón de gimnasia, dejando sólo al Omega mayor

Retiro aquella campera rojiza de su cuerpo, para realizar sus propio estiramientos, necesitaba sacarse ese sentimiento de molestia

— Alfa

Jimin ronroneo en el pecho de aquel Alfa, dejándose envolver por aquel adictivo aroma

Rosalie y Jasper quisieron correr hasta el Omega, siendo detenidos por Emmet y Alice

— Sueltame — gruño Rosalie, observando con odio como Edward respiraba en el cuello de su pequeño

— Tranquilo, debes respirar cariño — susurro Alice, intentando llamar la atención del sureño, siendo una misión imposible

La mirada de Jasper se mantenía pegada en la pareja, como si quisiera lanzar lejos a su hermano, y llevarse lejos al pequeño Omega de el cobrizo

— Alfa~ — canturreo Jimin con alegría, tomando de la nuca a "Edward", según había escuchado de la siseante voz de Rosalie

Rozó ligeramente su nariz con el pálido, sin darle mucha importancia a su gélida piel, sus lindos ojitos se pegaron en la mirada perdida del más alto

Jimin reunio aquella pequeña valentía que golpeaba en su pecho, para dejar un beso en la comisura de sus labios, finalmente despertando al Alfa de su ensoñación

Pink Boy | 𝐄𝐝𝐰𝐚𝐫𝐝 𝐂𝐮𝐥𝐥𝐞𝐧Donde viven las historias. Descúbrelo ahora