Prólogo

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—Nada, es como si el mundo se lo hubiera tragado, como si esa maldita de Sandiego se lo hubiera tragado —Gruñó al terminar aquella frase, la mujer de escarlata había desaparecido lo más preciado que tenía

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—Nada, es como si el mundo se lo hubiera tragado, como si esa maldita de Sandiego se lo hubiera tragado —Gruñó al terminar aquella frase, la mujer de escarlata había desaparecido lo más preciado que tenía.

¿Tu familia no ha hecho nada por buscarlo? —Una voz femenina salió de los audífonos de la adolescente de larga cabellera negra.

—Negativo, sé que no lo harán, son las reglas de la familia, "si nos decepcionas, te olvidamos" —Soltó un suspiro de frustración, mientras se acomodaba en el asiento de aquel restaurante de comida rápida que tanto le fascinaba. Los colores tan saturados de las paredes le irritaban la vista, pero valía la pena por la tan esperada comida, su paladar que había sido tratado con los más deliciosos manjares del mundo por mucho tiempo ahora se había vuelto adicto al sabor de la comida rápida.

—¿Y si le pides información a V.I-

—Sabes que lo hice y se negaron, no tengo más opciones que atrapar a Sandiego para ellos a cambio de información sobre su posible paradero —Se acomodó los audífonos mientras finalmente se levantaba de su acolchado asiento para tomar su pedido ya preparado.

—Que lo disfrute, señorita...Rosaline —El atendedor le entregó su orden junto a una figurita de regalo que venía incluida con su pedido.

—¿Rosaline? —Cuestionó la otra fémina a través del audífono.

—¿Qué? —Con la orden en mano se sentó y colocó su orden frente a ella empezando a abrirla con algo de apuro —Es solo un alias, ya sabes, para que no hayan registros míos por allí, tú más que nadie debería saberlo "Miss Angel" —Ante lo último dicho soltó una pequeña risita.

—Para tu información Miss Angel suena mucho mejor que Rosaline. Pero volviendo al tema, ¿ahora qué? —preguntaba con algo de preocupación en su voz la contraria, pues no habían muchas respuestas para ella.

—Ahora haré lo único que parece viable, investigar a Sandiego hasta encontrar cómo debilitarla y llevarla con V.I.L.E., debe haber una razón tras el porqué siempre logra salir victoriosa de todas esas misiones, y yo me encargaré de averiguarlo.

—Con mi ayuda, claro —respondió orgullosa su compañera de crímenes.

—Por supuesto, pero antes, quiero saborear esta deliciosa hamburguesa —Dio un enorme mordido a su hamburguesa, tenía suerte de que su familia no estuviera allí para verla actuar de esa forma tan vulgar.

«Prepárate, Carmen Sandiego, porque te tendré como un ratoncito entre mis garras.»

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❝ ¿Dónde en el mundo estás? ❞ ︴Player x LectoraDonde viven las historias. Descúbrelo ahora