Ella

38 0 0
                                    


Llegar al pueblo donde madre y yo vivíamos, fue muy difícil, muchas cosas habían cambiado en el, el pequeño y cálido pueblito que conocía aún era cálido pero ya no era tan pequeño.

Aún conserva esa calidez y frescura, el aire conservaba su aroma a flores, confieso que estoy nervioso, hace mucho tiempo que no e visto a madre, desde que me fui, no volví a este lugar.

Me dolió dejarla, pero era la mejor decisión, aunque doliera tenía que hacerlo, debía irme con padre, tenía obligaciones, como primogénito o bueno, único hijo.

Llegando al lugar el conductor del carruaje, se detuvo y de inmediato bajo a abrirme la puerta del transporte en el que yo iba.

Bajando me encontré con una señora de sonrisa cálida, preguntando por mi nombre

-Disculpa- lo piensa - eres Deison Willd verdad?-pregunta.

-si, lo soy bella dama-respondo.

Entonces me brinda a una sonrisa aún más cálida.

Y de inmediato le dice a la chica joven a lado de ella
-ve y avísale a los demás que ya está aquí.
A lo que la joven asiente y se retira

A mi parecer está entre sus 15 a 16 años, deduzco que es su hija ya que la señora parecía tener sus 30 años de edad y la joven le obedecía, aparte de eso se parecen mucho.

De pronto la señora me vuelve a dar una sonrisa cálida y me dice.

-Tu madre ya se había desanimado, creyó que no vendrías-dice ella agarrando uno de mis brazos para llevarme al lugar donde me recibirían.

Una vez ya llegando, veo a madre a una distancia considerable, los años le habían venido encima, recuerdo lo joven que se veía cuando me fui, pero esa sonrisa aún la conserva, y eso me calma un poco de sentirme culpable.

Mis piernas empiezan a movilizarse por si solas, asía la señora de cabellos negros con rayos blancos como la nieve, pintados por los años y los días que han pasado, cada cabello cuenta una historia, y demuestra la paciencia y la lucha, que a tenido constante mente madre.

De un momento a otro me sentí algo observado, lo cual era obvio, pero no sé por qué sentía que me miraban diferente, y fue hay que me di cuenta que había una joven, de casi mi edad al lado de madre, al parecer son muy cercanas, esa chica de hermoso cabello, y mirada penetrante como si escondiera algo.

Al alcanzar a madre, la abrazo con todas mis fuerzas posible, intentando no lastimarla, por consiguiente me arrodilló con lágrimas entre los ojos, pidiendo disculpas.

-Madre, aquí esta tu hijo, espero lo recibas con amabilidad, espero recibas a este hijo que se a ido y a regresado después de años de ausencia, este hijo que no escribió ni una miseria carta, para la mujer que le dio la vida, y le enseño valores durante el tiempo que lo tuvo con ella-digo entre sollozos.

Madre me agarra de los hombros me levanta, y me dice.

- Mi pequeño, no tan pequeño y único hijo que tengo a regresado a mis brazos, como no recibirlo, si e anhelado este día por años, por noches, por mañanas, por atardeceres, cada segundo e instante, pedí por qué volvieras a mi regazo, así sea por un corto tiempo con migo, mi pequeño leonesillo, mi pequeño niño bienvenido, cariño mío-procede a besarme una mejilla.

Procedo a volverla a besar y abrazar
Y así pasaron unos segundos, abrazando a madre, con las miradas de todos encima nuestro, eso se volvió algo incómodo para mí y decidí despegarme de madre.
Segundos después de haberme despegado de madre y ver las lágrimas en sus ojos emanando felicidad y melancolía por unos segundos procedo a secárselas , después alguien grita,
-¡alégrense todos por qué el hijo de nuestra querida Morrys a regresado!- dice y por reacción todos gritan de alegría.

Por consiguiente ponen música y comienzan a bailar, muchos se me acercaban a saludarme, pero ella no lo hacía, y eso me causaba curiosidad ella debería acercarse, después de ver su mirada encima mío, y sentirme así jure que se me acercaría, como todas las demás lo hicieron, espere un poco más pero aún así ella, seguía sin acercarse.
Después de esperar decidí acercarme, confieso que las piernas me temblaban, no podía mantener mi propio equilibrio, no sé pero ella causa está sensación llena de confusión en mi, antes de llegar donde ella, lo empiezo a dudar por un momento, ya que debido a mi condición, no debería acercarme a ella y conocerla, ya que esto puede terminar mal, pero aún así no me hice caso y continúe.
-Hola mucho gusto, me llamo Deison-le saludo con una sonrisa en mi rostro.
Ella se veía avergonzada, anonadada, parecía una estatua de hielo, hasta que al parecer decidió dejar de estar en shock, que claro era por mi belleza, quién lo niega.

-¡Ho-ho-hola! Me- me llamo Elaya- dice ella algo nerviosa.
Se vio muy tonta, no sé por qué me acerque a ella.
Ah, cierto su mirada penetrante la que en estos momentos no dejaba de registrarme, de pies a cabeza, como si quisiera memorizar cada parte y rincón de mi cuerpo.

-Te e puesto nerviosa- digo para no dar a mostrar cómo me encanta ser registrado por ella.
Ella parece aún no reaccionar, hasta que
-y tu qué te as creído, que seas hijo de la señora Morrys no me impide darte un puñete por alabancioso- habla ella algo sorprendida y en defensiva.
-Pero señorita es usted la que a gagueado al yo saludarle y es usted quien se a quedado registrándome todo el tiempo-digo.

Se sorprende y comienza a ponerse muy nerviosa, parece que no tiene palabras en la boca, pero se ve tan linda, tan pura, como quisiera que fuera ella.

-Deison querido-dice madre- oh! veo que ya se conocieron, no hay necesidad de presentarlos entonces- dice madre entre sonrisas-intenten conocerse más, verán que se agradarán mucho- menciona contenta y se retira.
Me la quedo mirando y le digo
-Perdón, fui un idiota, ¿empezamos de nuevo?- digo algo arrepentido por mi arrogancia.
-No lo sé, siento que no me eres sincero- dice dudosa
-créeme estoy siendo sincero-le confieso

Nos quedamos mirando, y un silencio rodeo todo el ambiente, sin querer, terminamos juntando nuestras miradas, y las esquivamos lo más rápido posible, todo se volvió incómodo, pero esa incomodidad era agradable.

Después de ese momento nos separamos, ella por su lado ayudando a madre con los asuntos de la fiesta y yo, conociendo a medio pueblo, que aunque es aburrido, es algo a le que ya estoy acostumbrado, padre me dijo que es cortesía saludar a los ciudadanos y hablar con ellos.

Después de bailar, cantar, reír, y conocer gente nueva, la fiesta acabo y todos se retiraron a sus casas, no sin antes despedirme de madre, de ella y de mi.

Después lo recogieron todo, y me dirijo a mi recamara para descansar, aún sin poder sacarme de la cabeza todas las sensaciones que surgieron, por culpa de Elaya, aunque no debería de hacerlo, se me es prohibido mirar a otra persona antes de casarme, aunque me gustaría elegir con quién casarme no puedo, padre ya me dijo que la única mujer con la que puedo sentir algo parecido al amor, es con ella, esa chica de la cual no sé nada, no conozco nada, ni siquiera la e visto y todo por rumores y un promesa entre el y su mejor amigo.

Quisiera poder decidir, pero si no fuera por padre, yo no estaría aquí, o tal vez si, pero creo que no hubiese tenido la vida que padre me dio, ni tampoco algo por lo que luchar, nadie aquí sabe quién es mi padre, y no lo sabrán hasta que me case, ellos no saben nada, y madre lo supo ocultar muy bien.

HOLI PERSONITAS BELLAS
VENGO A PEDIR DISCULPAS POR NO ACTUALIZAR ANTES, PASA QUE E ESTADO UN POCO OCUPADA Y NO E TENIDO Tiempo DE ACTUALIZAR.

DE TODAS FORMAS AQUI LES DEJO ESTE CAPITULO NUEVO.

A Y SE ME OLVIDABA LA HISTORIA TIENE PLAYLIST EN SPOTY ESTA CON EL NOMBRE DE LA NOVELA, A SIQUE SI DESEAN PUEDEN IR Y ESCUCHAR Música MIENTRAS LEEN.

TOMEN MUCHA AGUA SE LOS QUIERE BEBUS

*si alguien quiere hacer videos sobre la historia o imágenes pues pueden hacerlo dándome el derechos e la historia*


¿Quién soy yo?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora