Conociendo el futuro

El Inicio del Fin

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Gotham

Enero 12, 2022

2:55 pm

—¿Entonces tienen planeada una cita?

—Sí, hemos planeado esto durante semanas, no podemos cancelarlo.

Dick rodó los ojos ante la respuesta que recibió en la llamada desde su comunicador, aunque la mayor parte de su atención estaba en la carretera frente a él mientras conducía.

—Wally, no quiero ser aguafiestas, pero te recuerdo que hay versiones de nosotros de hace diez años en la Atalaya. Y hoy casi murieron.

—Lo sé, y sé que es importante, pero tampoco vamos a dejar de vivir nuestra vida, ¿verdad? Ellos estarán bien.

Entró a la finca de la mansión y se dirigió a la entrada principal para estacionarse.

—Cómo sea, solo te llamaba para decirte que los tubos zetas ya funcionan, si es que deciden asomarse por allá.

—¿Estás allí? ¿Ya viste a los chicos? ¿Están bien?

Le causó gracia que estuviera tan preocupado, pero que no tenga la intención de ir a verlos.

—No, no y... sí, o al menos eso fue lo que me dijo Jason. Ahora mismo acabo de llegar a la mansión —se bajó de su auto y cerró la puerta activando la alarma.

—Bueno, en ese caso tal vez lleguemos mas tarde a la Atalaya... —hubo una pausa y escuchó un murmullo —. Eh, dice Artemisa que los mas probable es que vayamos a estar ocupados con... eh, un maratón de películas y series.

Dick hizo una mueca de asco cerrando la puerta de la mansión detrás de él.

—Tranquilo, no necesito detalles de sus actividades recreativas.

—Amigo, tenemos pendiente un maratón de Game Of Thrones desde hace días...

—Ya, Wally, solo te estoy tomando el pelo —se rio de las excusas pobres —. Si hay algún avance con los chicos, los llamo. Desfruten su noche de películas.

—Excelente. Nos vemos luego entonces.

—Adiós.

Colgó la llamada y se dispuso a ir directo al estudio de Bruce. Ignoró la ligera molestia que lo invadió al saber que el resto de sus amigos no tomaban tan en serio la situación.

Recordó que no había visto a Alfred hacía ya un buen tiempo. Miró su reloj y pensó que a esa hora el mayordomo estaría recogiendo a Damian de la escuela, sin embargo, esa teoría se esfumó cuando el hombre británico se asomó en el pasillo que daba al estudio de Bruce.

—Alfie, ¿Bruce fue por Damian hoy?

El mayordomo sonrió al ver a su protegido más entusiasta.

—¿Y de esa forma me saluda? Esperaba algo más después de no verlo por una semana.

Dick se sonrojó levemente y obedeció a su viejo amigo envolviéndolo en un abrazo de oso.

—Me alegra verte, Alfie. ¿Cómo estás? ¿Tuviste un buen viaje?

—Un viaje cansado tengo que admitir. Me alegra regresar a casa.

—Me alegra tenerte en casa —lo abrazó una vez más.

Alfred correspondió el gesto cariñoso con una sonrisa sincera. En el fondo se alegraba de que al menos una persona en esa familia no se esforzaba por parecer un robot sin sentimientos.