Príncipe Heredero del Cielo

✨PRIMER EXTRA✨

Algunas aclaraciones y/o advertencias antes de comenzar.

 Ya lo he hecho antes en este fic, pero, mas vale prevenir, habrá ocasiones en las que me refiera a Wei WuXian como MADRE.

Lan Yang, de cortesía ChengMei, jamás creyó verse deslumbrado por una persona que no fuera su madre y su hermano menor, Lan Qiang.

Pero heló ahí, pasmado y quieto como una estatua mientras observa al muchacho que acaba de salvarle el trasero. No es que no hubiera visto venir el ataque a sus espaldas, pero el espíritu había tenido un arranque de velocidad y el ataque casi estuvo a punto de tocarlo, sin embargo, jamás llegó gracias al chico de blanco que ahora lo miraba con amabilidad.

—Debes tener más cuidado. — le dijo su salvador con una sonrisa gentil. Por unos momentos no pudo evitar pensar en su tío XiChen y su eterna sonrisa. —Eres hábil, pero algo descuidado.

Lan Yang inmediatamente frunció el ceño y bufo molesto. Si bien admitía que era demasiado impulsivo para su propio bien y la mayoría del tiempo terminaba lastimado y castigado, no iba a permitir que ese desconocido-por muy su salvador que fuera- lo tratase como un discípulo que apenas estaba comenzando su formación.

Lan Yang: —No necesitaba tu ayuda. — le dijo volteando la cara hacia un lado mientras se cruzaba de brazos. El desconocido rio bajo, pero lo suficientemente fuerte para que Lan Yang lo escuchara. —¡Tu!

—Lo lamento. Es que eres muy gracioso.

Estaba por comenzar a enumerarle las razones por las que él no era gracioso cuando se dio cuenta de que la impecable ropa blanca se estaba tornando roja en el lado derecho: —Estas herido. — con rapidez se acercó y justo cuando estaba por tocarlo una espada fue colocada sobre su cuello.

—Song Lan.

Lan Yang rodo los ojos antes de utilizar uno de los talismanes que Wei Ying le había dado y así librarse del agarre del llamado Song Lan:—¿Qué demonios? — pregunto con el ceño fruncido. El llamado Song Lan lo miro con frialdad por unos segundos antes de dirigir su atención al chico de blanco. Lan Yang jamás se había sentido tan ignorado. Así que como la persona racional que era dio media vuelta y se fue murmurando maldiciones que su tío BingHe solía decir cuando su Shizun lo sacaba a patadas de su hogar.

El Lan recordó el por qué estaba allí. Un pueblo bastante alejado de Gusu y las otras sectas, los rumores sobre la repentina desaparición de todos los habitantes de dicho lugar habían llegado a Gusu hace solo unos días. Según las malas lenguas un cultivador demoniaco había hecho desaparecer a todos, otros más atrevidos juraban que los demonios lo hicieron como aviso de que se habían cansado de vivir bajo la tierra. El ultimo rumor era lo más estúpido que había escuchado desde que en Caiyi habían inventado que su hermano más chico había dejado en cinta a una doncella por medio de un sueño.

Ridículo, demasiado ridículo y aun las personas se lo creyeron solo porque Lan Qiang era el único hijo de sangre de Lan WangJi y Wei WuXian, por lo que, si Wei WuXian pudo quedar embarazado y dar a luz, ¿por qué su hijo no podría dejar en cinta a una doncella por medio de los sueños? De solo recordarlo de daban ganas de echarse a reír. Pobre su hermanito, estuvo por días siendo acosado por la familia de la joven y la chica para que se hiciera responsable, afortunadamente Xie Lian había estado allí para desmentir tal estupidez.

Volviendo a lo importante. Lan Yang pudo divisar la cuidad la cual estaba rodeada de una gran cantidad de energía resentida. Había estado expuesto a lugares con energía resentida, así que estaba acostumbrado a tratar con ella, después de todo el y XuanYu eran los únicos a los que Wei WuXian les había permitido aprender a manejar la energía resentida. El, por ser el mayor y haber demostrado un fuerte control con dicha energía y XuanYu para compensar la debilidad de su núcleo dorado.